Dolor crónico: 5 Tratamientos psicológicos efectivos

El dolor crónico afecta a todos los aspectos de la vida de aquella persona que lo padece. Por ello, tratarlo a través de una terapia psicológica puede ser una opción genial para poder lidiar con el dolor generalizado. Descubre cómo un tratamiento psicológico puede cambiar tu perspectiva alrededor de los dolores en todo el cuerpo.

¿Cómo nos afecta el dolor crónico?

El dolor crónico no solo tiene efectos a nivel físico, sino que este provoca grandes cambios tanto en el cerebro como en el sistema nervioso central. Las investigaciones al respeto indican que como resultado, todos los efectos del dolor crónico acaban relacionándose con síntomas como puede ser la ansiedad y la depresión. 

Además de ello este dolor en todo el cuerpo puede llegar a provocar también estrés crónico, lo que acaba afectando la capacidad que tiene el cuerpo por curarse y promueve aún más el dolor. 

De esta forma, el dolor crónico no solo nos afecta de manera física sino que tiene muchas consecuencias psicológicas. Por este motivo, debemos acudir al tratamiento de un psicólogo profesional para reducir sus efectos en nuestra mente y cuerpo. 

Efectos del dolor crónico

El dolor crónico afecta en muchos aspectos en la vida de la persona que lo padece. Principalmente, podemos identificar los siguientes problemas o señales que identifican que puedas estar en un caso donde el dolor generalizando está trabando tu vida. 

1. Convivir con el dolor

Vivir en una situación de dolor crónico conlleva mucho sufrimiento, mucha invasión y alteraciones a nivel intrapersonal, familiar, social y del día a día de la persona. Este impacto excede, frecuentemente, a las habilidades de la persona para afrontarlos, por lo que el tratamiento psicológico está claramente indicado. Tal y como ellos mismos expresan en algunos foros, al cuadro clínico propio de la enfermedad se asocia a: el peregrinaje hasta su diagnóstico, la incertidumbre asociada, la no respuesta del sistema sanitario a su problema, la incomprensión de la familia, las etiquetas sociales de "fingidoras" por la inexistencia de causa orgánica...

En ocasiones, hasta la existencia de profesionales sanitarios que manifiestan "no creer en su enfermedad", como ocurre en algunos diagnósticos como el de fibromialgia (opinión citada por propios pacientes; las autoras de este documento no se posicionan en ello) Todo un cúmulo de experiencias que puede devenir en síntomas depresivos y ansiosos debido a este dolor agudo que sienten. 

2. Identidad

El dolor crónico acaba invadiendo la vida de estas personas, se acaba adueñado de su identidad. En este sentido, pasan de ser personas a ser "personas con dolor", lo cual afecta en su día a día, en cómo se relacionan, en qué hacen y qué no. Les convierte en otras personas, diferentes de aquellas que eran antes del dolor.

Llegados a este punto, nos parece evidente que el hecho de padecer dolor crónico plantea la necesidad de trabajar sobre los efectos psicosociales, vivenciales y de identidad que conlleva el padecimiento del mismo.

3. Dolor catastrofista

En muchos casos las personas que conviven con estos dolores por todo el cuerpo suelen magnificar los efectos negativos del dolor. Tanto es así que acaban concentrándose en los sentimientos de impotencia mientras reflexionan sobre la presencia del dolor en la vida. En algunos casos los pensamientos negativos hacia el dolor a menudo conducen a un empeoramiento de la vida emocional y social de la persona que padece de estos dolores crónicos. 

4. Miedo al dolor

Estos tipos de dolor acaban generando un exceso de preocupación en la persona que lo padece. Tanto es así que en muchas ocasiones esta anticipación acaba limitando la participación en actividades físicas o en algunos eventos sociales. 

5. Trauma

Según diferentes investigaciones, existe un vínculo entre el trauma y el dolor crónico. De esta forma, a través de una terapia psicológica se puede abordar las respuestas del dolor muscular crónico y corporal que están vinculadas a estas experiencias traumáticas. 

A través de una terapia psicológica, las personas que sienten dolor crónico pueden aumentar su bienestar y mejorar la adaptabilidad a esta enfermedad. 

Tratamiento del dolor crónico

Desde las instituciones españolas de Psicología, se ha enfocado el tratamiento desde una perspectiva cognitivo-conductual, potenciando "cambiar las actitudes y comportamientos aprendidos en relación con el dolor y modificar de esta manera tanto la conducta manifiesta como la experiencia subjetiva de dolor." De esta forma, existen los siguientes tratamientos para el dolor crónico en una terapia psicológica. 

1. Enfoque basado en atención plena

En el dolor crónico, un tratamiento que ha demostrado su efectividad es precisamente este enfoque a través de la atención plena. Esto es debido a que cuando el cerebro se enfoca a una sensación que implica un dolor severo, empezamos a desarrollar pensamientos negativos alrededor de ellos. La atención plena consiste en intentar ver este dolor sin juzgarlo y aprender a apartarlo de nuestras vidas poniendo el foco de la atención en nuestra respiración. 

2. Terapia cognitivo-conductual

En muchos casos estos dolores en todo el cuerpo acaban suponiendo un diálogo interno negativo en la persona que lo padece. Tanto es así que se pueden combatir la depresión y la ansiedad que se derivan de ellos a través de la terapia cognitivo conductual, un método que te permite desafiar estos pensamientos negativos y aprender nuevas formas de pensar o de enfocar tu vida.

3. Técnicas de relajación

Las técnicas de relajación nos permiten lidiar con la tensión de estar sintiendo contantemente dolores por todo el cuerpo. A través de la relajación de los músculos, las personas pueden sentir grandes alivios en estos tipos de dolor. 

4. Hipnosis

Diversos estudios han demostrado que la hipnosis es eficaz para tratar el dolor crónico y mantenerlo a raya. Al entrenar la mente a través de la hipnosis, los psicólogos ayudan a reducir el dolor en la mayoría de las personas que sufren de este dolor de cuerpo. 

5. Terapia de aceptación y compromiso

Otro tratamiento del dolor crónico a través de la psicología es esta terapia. Este tratamiento se enfoca a aceptar las cosas de la vida que están fuera de nuestro control, mientras intentamos comprometernos en mejorar y enriquecer nuestra vida. 

Cada tratamiento del dolor crónico que hemos mencionado trata de enfocarse a combatir la sensación que produce estos malestares. Por ello, siempre es necesario contar con la presencia de un profesional de la psicología profesional. Deja atrás todos los tipos de dolor asociados a esta enfermedad. 

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