¿Cómo combatir el cansancio mental? 7 Signos que indican que debes 'apagar' la cabeza

¿Sientes un cansancio extremo? ¿Crees que el agotamiento físico y mental se está normalizando en tu vida? Si es así, quizá estés sufriendo de fatiga mental. El cansancio mental puede producirse debido a una actividad cognitiva demasiado prolongada. De esta forma, la persona que tiene esta sensación de cansancio y de embotamiento mental puede acabar derivando en una enfermedad psicológica o física que límite aún más tu día a día. 

Cuando el cansancio mental o la fatiga mental no se toma en serio y se acumula puede conllevar consecuencias graves. La pareja, el trabajo, la organización de actividades, los niños: se trata de una buena combinación que hace que tus tareas se acumulen y no te quede tiempo ni de pensar durante la semana. Sí, todos podemos ser multitarea pero existe un gran riesgo cuando se exagera nuestra faceta de "superwoman" o "superman". Entonces, ¿Cómo podemos detectar esta saturación mental?

¿Qué es el cansancio mental?

Cuando existe una fatiga mental ocurre lo mismo que cuando sentimos un cansancio excesivo en nuestro cuerpo físico. Es decir, en lugar de tener los músculos del cuerpo en un estado de agotamiento, la persona siente un aturdimiento mental debido a un exceso de trabajo mental. El agotamiento mental suele aparecer cuando una persona se concentra demasiado en una tarea mentalmente difícil durante un tiempo muy prolongado. 

Además, otra de las causas más comunes de sufrir de esta saturación mental en la actualidad es cuando la persona tiene la tendencia de estar siempre en alerta debido al estrés o a la ansiedad. Cuando nuestro cerebro no puede descansar debido a este agotamiento psicológico, las consecuencias pueden ser devastadoras tanto para nuestra vida como para nuestra salud física y mental. 

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Síntomas de agotamiento físico y mental

¿Te sientes irritable? ¿Enfermas a menudo? ¿De pronto parece que te has vuelto torpe? ¿Tu deseo sexual ha disminuido o bien es inexistente? ¿Has empezado a perder el gusto por lo que antes te encantaba? Cuando todo esto ocurre, es muy probable que sufras de fatiga mental por exceso de trabajo.

1. La fatiga mental o el cansancio mental también afecta a tu condición física: dolores de cabeza, disminución de la energía, trastornos digestivos, etc., son solo algunos de sus síntomas. Para poder detectar si realmente sufres de un agotamiento mental que puede afectar tu salud psicológica y física, los psicólogos recomiendan poner atención en los siguientes signos. 
2. Estás irascible e impaciente: El agotamiento extremo, tanto mental como físico, pone de mal humor. Por este motivo, las personas que sufren de este cansancio general suelen tener mal genio o estar muy irritados. Normalmente cuando el agotamiento psicológico es muy persistente, las emociones toman el control en la mayoría de las situaciones. 
3. Falta de concentración: Uno de los síntomas más comunes cuando existe un caso de agotamiento mental o de cansancio excesivo es que la productividad de la persona disminuye. La razón de ello es que la fatiga mental suele dificultar la capacidad de concentración que tiene un individuo. Tanto es así que incluso hasta las pequeñas tareas pueden parecer muy abrumadoras. 
4. No dormir bien: A pesar de que nuestra lógica nos diga lo contrario, cuando nuestro cerebro está cansado debido a una saturación mental las personas acostumbran a sufrir más de insomnio o de problemas para conciliar el sueño. Entonces, esta falta de descanso puede empeorar aún más la fatiga mental. Es por ello que este cansancio psicológico puede llegar a derivar en otras patologías como la ansiedad y la depresión. 
5. Abusar de las drogas: Las personas que sufren de los síntomas de agotamiento físico y mental pueden llegar a acudir al consumo de drogas más de lo habitual. La razón de ello es que acuden a este tipo de sustancias para poder manejar tanto las conductas impulsivas como el estrés, la ansiedad y el cansancio relacionados con su fatiga mental. 
6. Estás más triste: La falta de energía y la poca efectividad en las tareas mentales o físicas pueden llevarte a experimentar más tristeza de lo habitual. La saturación mental conlleva también más dificultad para manejar cualquiera de las tareas diarias que se nos presentan así como las relaciones sociales. Por este motivo cuando el cansancio mental se apodera de nuestras vidas, es vital poner atención a nuestro estado de ánimo, ya que esto puede derivar en una depresión. 
7. Te preocupas mucho: Nuestro organismo activa el sistema nervioso simpático cuando estamos en una situación de fatiga mental. La razón de ello es que estamos en alerta, es decir, tenemos la sensación de que algo está mal. Cuando una persona está agotada mentalmente de manera constante suele empezar a sentir preocupación todo el tiempo debido a esto. 
8. Cambian tus hábitos alimenticios: El cansancio físico y mental puede cambiar tus hábitos alimentarios. De esta forma, las personas que sufren de un cansancio excesivo suelen picar más de lo normal e incluso no prestar atención a aquello que se come. En muchos casos el estrés o la ansiedad asociada al cansancio suelen ir acompañados de antojos hacia alimentos azucarados, salados o más grasientos. 

Estos son algunos de los síntomas que pueden indicar que una persona está agotada mentalmente, ya que tiene su cerebro cansado debido a un gran sobre esfuerzo. En muchos casos este cansancio general y la apatía relacionados a ello suelen acabar derivando en enfermedades mentales y físicas, por ello es vital acabar con este agotamiento mental. Si te sientes identificado/a con muchas de estas señales, un psicólogo/a puede ayudarte a afrontar esta fatiga mental. 

¿Qué causa el cansancio mental?

Existen una serie de causas comunes que pueden derivar en una fatiga mental constante. Según la experiencia de los psicólogos, el cansancio mental suele aparecer por las siguientes razones.

• Toma de decisiones: Cuando estamos ante situaciones donde debemos tomar muchas decisiones, las personas pueden acabar sufriendo de este aturdimiento mental. Además, en algunos casos, existen individuos a quiénes les cuesta más que los demás tomar decisiones, sobre todo si estás son importantes. Esta indecisión también es una causa común que puede acabar en un agotamiento psicológico en la persona. 
• Compromiso excesivo: A veces el problema es que algunas personas no saben decir que no a lo que les exigen los demás. Cuando un individuo se compromete a realizar muchas tareas, los síntomas de agotamiento físico y mental pueden aparecer. 
• Evitación y procrastinación: Aunque parezca ilógico, la realidad es que procrastinar es mucho más agotador de lo que a primera vista parece. La razón de ello es que cuando evitamos realizar una tarea que debemos hacer, la ansiedad aumenta debido a ello. De este modo se puede producir la fatiga por la ansiedad ante el trabajo que en algún momento u otro tendremos que hacer. 
• Perfeccionismo: Las personas excesivamente perfeccionistas también pueden sufrir de episodio de agotamiento mental. Esto sucede ya que el perfeccionismo es una arma de doble filo que puede autosabotearnos haciendo que las personas rumien y se preocupen alrededor de una tarea de una manera excesiva. 
• Estrés: Como hemos mencionado, actualmente, el estrés es una de las causas más comunes que pueden acompañar el cansancio mental. De hecho, es muy normal que si se experimenta un estrés crónico, las personas acaben con una falta de energía y con fatiga mental. 

Estas son algunas de las razones que pueden inducir a tener un cansancio mental permanente en tu vida. Por esta razón, si crees que estás en alguna de ellas, es importante que consultes con un psicólogo profesional. 

¿Cómo quitar la fatiga mental?

Para poder combatir el cansancio mental lo primero es reducir nuestro ritmo de vida. Para ello, los psicólogos recomiendan lo siguiente.

• Aprende a delegar: Aprende a confiar en otros para aclarar tu mente. Si no acostumbras a actuar así deberás aprender a hacerlo. Cada uno tiene su manera de hacer las cosas, deja de intentar supervisar y controlarlo todo. Prueba a cambiarlo por disfrutar de la lectura, ver un espectáculo, practicar deporte o simplemente no hacer nada. Esto permite que tu mente descanse y escape durante un tiempo de las responsabilidades diarias. Al delegar le estamos dando un espacio a nuestra mente y esto es una buena herramienta para combatir el cansancio mental. 
• Deja de presionarte: ¿Eres perfeccionista? Malas noticias. Esta obsesión por la perfección suele ir acompañada de una insatisfacción crónica. ¿Cómo no rendirse al perfeccionismo? Cuando tengas una tarea pendiente establece una fecha límite, respétala y, una vez realizada, no vuelvas a perder tiempo en ella. Otro consejo que funciona muy bien es observar tus pequeños momentos de felicidad del día a día, desde el café de la mañana hasta las dulces palabras de tu pareja o las risas con amigos. Toma nota de esos momentos de felicidad y libera la presión. 

• Descansa tu mente: En este mundo hiperconectado la tecnología no siempre es el mejor aliado de nuestra mente. Estamos haciendo algo, nos llega un mensaje y vamos corriendo a coger el teléfono. Una vez ahí, revisar un mensaje se puede convertir en leer noticias, revisar la cuenta bancaria, ver recetas, organizar la lista de la compra... Todo esto es una fuente de agotamiento para nuestra mente porque no le dejas desconectar. Puedes limitarte las horas de conexión diarias o establecer un tope horario, a partir del cual no te conectarás a internet. ¿Una idea que puedes implementar ahora mismo? Cuando suene el móvil no hace falta que salgas corriendo a ver qué es. Prueba a revisarlo cada hora. 
• Practica el dejar ir: Haz descansos, tan sencillo como eso. Aquellas personas que no pueden dejar de pensar o sufren de ansiedad, estrés o culpa que le impide tranquilizar su mente, es interesante aprender a meditar, a hacer mindfulness o yoga. Estas técnicas te ayudarán a canalizar tus pensamientos y a relajarte mental y físicamente. Al dejar los pensamientos atrás el aturdimiento mental se reducirá de manera escalada, así que puedes incluir estas prácticas en tu día a día. 
• Pon su mente en 'standby': La mente necesita dormir para recargar sus baterías. No hace falta decir que estimular tu cerebro mirando una película antes de quedarte dormido no te ayudará, concéntrate en leer un libro y mantente alejado de las pantallas. Empieza una rutina relajante una hora antes de acostarte y verás los resultados en poco tiempo. 

Si aun así ves que no puedes controlar esta situación, los profesionales de la psicología están ahí para ayudarte a encontrar tu bienestar físico y mental. Estar en un estado donde el cansancio mental es constante no es un modo de vida. 

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