Parejas que amamos en la gran pantalla pero que en realidad eran relaciones tóxicas

Existen cantidad de parejas con las que disfrutamos tanto en las películas como en las series. Lo cierto, es que el hilo romántico y dramático que nos aportaban nos tenían enganchados a las historias de amor de estas parejas. Pero, ¿eran del todo sanas?

Según Caro, en os esquemas cognitivos de una relación tóxica los individuos se sienten inferiores hacia los demás y por este motivo se sienten dependientes de su pareja. Por este motivo, el resto de las cosas no les produce satisfacción e incluso placer, pues está repleto de obstáculos.

¿Qué perfiles psicológicos encontramos en una relación tóxica?

• Manipuladores: Aquellos que se sienten mejor engañando a otras personas o manipulándolas. Esto les suele reconfortar e incluso subir la autoestima.  En este perfil, podríamos hablar de los personajes de Blair Walforf y Chuck Bass en “Gossip Girl”.
• Narcisistas: Aquellos que se creen perfectos y no permiten que nadie les lleve la contraria. Incluso llega a descalificar las decisiones o creencias de otras personas. En este caso podríamos hablar del personaje de Perry White y Celeste en “Big Little Lies”.
• Agresivos: También pueden ser narcisistas, pero su principal característica es que emplean la agresividad verbal para hacer que la otra persona se sienta insegura y débil.
• Victimistas: Quienes piensan que todo lo que les ocurre es por culpa de otras personas y a través del chantaje emocional terminan haciendo que el otro individuo se sienta culpable.
• Críticos: Aquellos que a través de la crítica negativa hacia su pareja terminan consiguiendo que se sienta inútil y débil.

Relaciones tóxicas en el cine y las series

Ahora que ya conoces los perfiles más frecuentes frente a relaciones de pareja tóxicas, seguramente rondarán por tu cabeza cantidad de filmes o series donde has podido ver estos tipos. Hablemos de los más claros:

Gossip Girl:

A todos nos encantó la historia de amor entre Chuck y Blair, con sus idas y venidas, sus manipulaciones y complots. Pero, seamos realistas, la chica llegó a aceptar que él la cambiara por un hotel o que ella le engañase con el “chico solitario”.

Friends:

Como olvidar a los míticos Ross y Rachel. Son una de las relaciones de pareja más recordadas de la televisión a día de hoy. Y es que ellos nos demostraron que a pesar de lo diferentes que eran podían estar juntos. Con sus “nos estábamos tomando un tiempo” o rupturas por otras personas. Una relación que nos mostró que los ex podían ser amigos y que a pesar de muchas rupturas el amor siempre triunfaba. Pero, ¿crees que en la vida real sería cierto?

Gone Girl (Perdida):

Un thriller que consiguió que gracias a su trama terminásemos con la boca abierta. Igual que a a su protagonista masculino Nick Dunne (Ben Affleck). Un matrimonio que se odiaba, donde el chantaje psicológico o conseguir que la otra persona sufriera era la base del matrimonio. Un matrimonio que a vista de los demás era perfecto.

Blue Valentine:

Quizá el ejemplo más visual de cómo es una relación tóxica. Un filme donde los dos protagonistas a pesar de quererse solo hacen por herirse en todo momento. Sin duda, un tipo de relación de pareja que sabemos desde el primer minuto cómo va a terminar.

Big Litlle Lies:

Por último, una de las relaciones agresivas, narcisistas y tóxicas que hemos podido ver en los últimos tiempos en la televisión. La relación de Perry y Celeste, donde a primera vista es el amor perfecto pero que en realidad se basa en violencia y autoridad por parte de él.

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