Reflexiones sobre las sociedades desarrolladas y sus patologías

Los llamados "homo sapiens", en las sociedades "desarrolladas", nos estamos olvidando de los principios humanos y estamos aumentando las perversiones.

21 NOV 2014 · Última modificación: 17 DIC 2018 · Lectura: min.
Reflexiones sobre las sociedades desarrolladas y sus patologías

Los homo-sapiens hemos desarrollado un lenguaje complejo y unas capacidades intelectuales superiores, pero también hemos desarrollado un mundo de peligrosas perversiones, que no existían en las mentes de nuestros ancestros prehistóricos, distorsionado nuestras capacidades cognitivo-emotivo-afecticas y llevándolas a los límites de la autodestrucción y a las nuevas enfermedades psicosomáticas.

Lo que nos hace humanos es una realidad genética y biológica que nos liga directamente a los homínidos en la evolución de las especies animales y sobre la cual hemos desarrollado un lenguaje comunicativo complejo que nos ha permitido un mayor desarrollo de nuestras capacidades biológicas de base.

En definitiva somos "monos" superiores, con un lenguaje sofisticado y una estructura social compleja. Sin embargo paralelamente hemos desarrollado una actividad mental perversa, que nos aleja de la naturalidad de los primeros homínidos y que nos complica nuestra propia existencia humana. La agresividad puede ser útil para sobrevivir, defenderse y evolucionar en un mundo hostil. Sin embargo las perversiones no nos ayudan a vivir y nos sumergen en un mundo sin empatía, sin sensibilidad humana, que nos lleva lentamente hacia una muerte fría y dolorosa. Hemos desarrollado un lenguaje complejo y unas capacidades intelectuales superiores, pero también hemos creado un mundo de peligrosas perversiones, que no existían en las mentes de nuestros ancestros prehistóricos, distorsionado nuestras capacidades emotivo-afecticas y llevándolas a los límites de la autodestrucción.Tenemos que erradicar la perversidad de nuestras vidas. No podemos seguir viviendo únicamente para la satisfacción de nuestros caprichos a expensas de los otros, que son manipulados, maltratados y con sus necesidades fundamentales negadas.

Si fuésemos más humildes, reconociendo que podemos mejorar mucho pero que nunca seremos perfectos, podríamos disfrutar de la vida y de nuestras limitaciones como seres humanos, sin sentir miedo, vergüenza o culpabilidad por nuestras imperfecciones.

Los actuales discursos racistas, xenófobos y homófobos europeos, no son más que la penosa reacción defensiva de los que sienten que el "poder de sus ideas" se extingue e intentan mantener ese "poder" con agresiones y violencia. Machistas, Fascistas y Nazis, funcionan con la misma dinámica. Machistas, Fascistas y Nazis, están debilitados por una realidad que tendrán que asumir a pesar de sus resistencias.

Respeta a quien te respeta y no lo discrimines. A quien no te respeta "nunca le pongas la otra mejilla" (serías masoquista), hazle saber que las leyes están hechas para todos. Y si es necesario DENUNCIALO ante la justicia (porque de no hacerlo así, estás arriesgando tu vida).

No queremos más avaricia y más hambre, no queremos más ricos y más pobres, queremos una política igualitaria y respetuosa con las identidades diferenciales, sin imponer ninguna ideología, cultura o religión y con unos principios democráticos mejorados que permitan más transparencia y una participación más directa de los ciudadanos en las decisiones políticas de su población.

La anorexia y la bulímia solo existen en los países desarrollados, porque pueden preocuparse obsesivamente por su "imagen" corporal. En los países subdesarrollados, donde están pendientes de poder comer para sobrevivir, no se preocupan de su "imagen" corporal.

El amor auténtico de padres y madres, con cariño, afecto y respeto, a nuestros hijos e hijas, les proporciona más vida que cualquier alimento comestible.

No se trata solo de crecer económicamente para después distribuir a los pobres, eso ya se hace y nunca funciona a largo plazo, tenemos que ayudar a cambiar el sistema económico para que sea realmente sostenible y humanamente auto-gestionable.

La solidaridad es un principio humano fundamental por el que las personas se reconocen unidas, compartiendo derechos, deberes, preocupaciones, intereses e ideales, ayudandose y constituyendo uno de los pilares fundamentales de la ética de la igualdad humana, respetando los Derechos Humanos y la justicia socio-cultural que respeta las identidades diferenciales, en un sistema democrático.

Estamos inmersos en el culto a la imagen, en las relaciones superficiales e interesadas, en la riqueza material, en los lujos, en la violencia competitiva y en las perversiones. ¿Cómo van a desarrollarse nuestros hijos e hijas, con semejantes ejemplos y/o referentes?

En las sociedades llamadas "desarrolladas" nos estamos olvidando de la profundidad en las relaciones, de la honestidad sincera, de la naturalidad espontánea, del placer de crear para compartir, del disfrutar de las cosas sencillas y del deseo de un desarrollo personal más humano y más solidario.

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Escrito por

Dr. Jaume Cañellas Galindo

El psicólogo Jaume Cañellas es médico psiquiatra, psicólogo clínico y también psicoterapeuta. El profesional está especializado en medicina y también en psiquiatría. De hecho, es Psiquiatría Infanto-Juvenil y Psiquiatría Forense. Cuenta con Cañellas para tus sesiones de psicoterapia.

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