Confundida, no sé si separarme de mi marido
La verdad es que me cuesta mucho escribir mi problema y contárselo a otras personas. Me siento mal, culpable y confundida porque nunca pude imaginar que esto me pudiera ocurrir a mí.
Llevo casada dos años con mi marido, aunque viviendo juntos llevamos 13 años. Éramos amigos en un principio y poco a poco una cosa llevó a la otra y comenzamos una relación. No fue un comienzo normal, como otras parejas o yo por lo menos lo veo así. Fue porque un día me enteré que estaba interesado por mí y dije por que no, vamos a intentarlo. Él es un hombre bueno, trabajador y me trata bien, siempre con sus defectos como todo el mundo. Yo he dado todo lo que podía por él, le he apoyado en todo, le he ayudado en todo lo que he podido, pero siempre he sentido que yo le daba todo lo que podía y más y no me sentía completamente apoyada por él y comprendida, en parte porque su vida gira en torno al trabajo y solamente piensa en eso. Otro problema que a mí me trae de cabeza es el tema de las relaciones sexuales. He de confesar que no me siento atraída por él, creo que nunca lo he estado, pero ahora se ha agudizado. Desde hace muchísimo tiempo no deseo mantener relaciones sexuales con él, espero a que me lo pida, que tampoco me lo pide mucho e intento poner excusas, aunque otras le doy lo que me pide. Os confieso que era una mujer muy activa sexualmente, pero con él no sé porque no consigo que me apetezca. Hace un año se marchó de viaje y ahí me di cuenta que no le echaba de menos, puede ser por costumbre ya que él está trabajando, yo desde hace dos años estoy en paro, y cuando él vuelve a casa sólo duerme o habla de trabajo o se sienta delante del ordenador. Pero eso me hizo pensar...aunque si os soy sincera llevo pensando mucho tiempo que no quiero a mi marido que estoy con él por costumbre, aunque otras veces me digo, es bueno, convivimos bien juntos, no discutimos, a lo mejor confundo que es querer a alguien.
Pues para no liarme más, él regresó de su viaje y me dijo que tenía que volver para varios meses. Como yo estaba en paro me pidió que fuera con él, para no sentirse solo y yo accedí. Allí me sentí sola, muy sola, él estaba todo el día trabajando y cuando llegaba solamente hablaba de trabajo o dormía. Después de un tiempo hice amistades y por lo menos tenía personas con las que compartir mi tiempo libre. Así conocí a A, le llamaré así para no poner nombres. En cuanto vi a A, algo se movió dentro de mi, la verdad es que intenté por todos los medios que eso no fuera a mayores pero cuanto más le conocía más sentía por él. Seguimos siendo amigos, quizás lo debí parar a tiempo, pero me sentía tan sola que pensé que con una amistad no hacía nada malo. Pero todo se complicó cuando un día el me confesó que me quería. Yo me enfadé con él, le dije que no podía decirme eso que estaba casada, pobre, como si la culpa la tuviera él, en realidad era yo que al conocer sus sentimientos me sentía culpable por los míos y por saber que después de eso ya no me lo podía quitar de la cabeza. Él me pidió perdón y me dijo que podíamos seguir como amigos nada más. En ese momento, aunque ambos sabíamos que eso era imposible seguimos viéndonos como amigos.
He de decir que durante estos cinco meses que nos conocemos a parte de vernos, hablábamos por teléfono casi cinco horas diarias, al principio como amigos pero todo cambió cuando un día me besó, y otra vez me enfadé con él aunque sinceramente me moría de ganas. Hasta que un día fui yo la que no me pude resistir un poco guiada ya por el miedo de saber que regresaba a mi casa y quizás no le volvería a ver. Crucé la línea y me siento mal por ello, por mi marido, pero sinceramente fui en todos esos momentos que pasé con A. Tuvimos relaciones e intentamos disfrutar de todos y cada uno de los momentos que tuvimos antes de mi regreso, aunque él siempre me decía que esto no tenía que acabar que podíamos tener una vida juntos... yo me sentía culpable ante mi deseo de decirle que sí, pero lloraba y lloraba también por el daño que ya había hecho, porque me sentía mal como persona y por el daño que podía hacer si le decía a mi marido que lo dejaba, le hundiría la vida, ¿puedo ser tan mala persona?
Regresé a mi país, y todo se me hizo cuesta arriba, hecho de menos a A, muchísimo, aunque seguimos hablando como cuatro horas diarias, él lo está pasando fatal, dice que lo quiere dejar todo, que le da igual todo que solamente quiere estar conmigo, y yo en el fondo me siento como él. Ahora mi marido ha vuelto a ese país, y yo sigo echando de menos a A, aunque sé que debería echar de menos a mi marido.
En todo este mes que mi marido lleva fuera, he pensado en como quiero que sea mi vida, sé perfectamente que lo que ha empezado bien con A puedo no acabar bien y que en un futuro no estemos juntos, pero solamente quiero estar con él. Sin embargo, a veces me entran las dudas, y no paro de llorar porque creo que voy a hundir la vida de mi marido. A veces pienso en lanzarme, otras pienso en que soy muy egoísta por intentar ser feliz y hundir la vida de otra persona. He de decir que yo no he sido infeliz, pero tampoco completamente feliz a lo largo de todos estos años con mi marido. La vida con él es fácil pero yo no me he sentido completa totalmente.
Este es mi resumen, y aquí me quedo pensando si debo o no dar el paso. Sé que eso solamente lo puedo decidir yo, pero me vendrían bien algunos consejos o apoyo. No duermo, y no pienso en otra cosa. Mi marido volverá dentro de poco y eso todavía me angustia más porque lo que sí que tengo claro es que tengo que decidir ya que es lo que quiero en mi vida, porque si sigo con mi marido, no podré seguir con A, ni siquiera por teléfono, aunque esta idea me hace muy infeliz, y si deseo comenzar con mi vida me siento fatal y lloro una y otra vez pensando en lo mal que lo va a pasar mi marido, en que le estoy destrozándole la vida.
Gracias de antemano por todos vuestros comentarios.
