Me siento perdido y solo

Question

Padezco una enfermedad mental grave, siento que nadie me entiende, es difícil y ni siquiera sé si quiero porque soy el que mejor me puedo entender pero a veces es necesario ya que yo mismo confundo la realidad, todo se vuelve en mi contra y me agobia, intento luchar contra todo, estar feliz, no estar triste, no culparme y no culpabilizar a nadie, y nada funciona. Me propongo metas que consigo o no, y sé que trabajando duro voy a conseguir muy poco, tengo el alma partida, no tengo personalidad. Tal vez gracias a eso no tengo grades ambiciones que exijan mucho trabajo, pero al mismo tiempo a medida que avanzo pienso, ¿qué futuro le espera a un enfermo mental? Y me he de poner grandes metas.        Ahora para avanzar he de emanciparme, tengo 33 años y trabajo en C.E.T., padezco esquizofrenia, soy muy dependiente.        Me pregunto cómo lo voy a conseguir y no obtengo respuesta, la única respuesta es lo que sé; son demasiados frentes abiertos, y no encuentro fuerzas, es muy duro levantarse y ver que nada cambia, miro todo lo que tengo y no es suficiente, me da miedo seguir avanzando, creciendo mis objetivos esenciales a largo plazo se derrumban, hasta siento que no siento nada, amistad, amor, yo mismo, nada me llena, y no puedo ni llorar, alguna vez lo he hecho y las lágrimas me queman la cara.         En mis crisis las cuales me hicieron entender que no hay que mirar atrás porque no llega un punto donde el sufrimiento es de 10 y ya no puede ser peor si no que hay un 11, 12, 13... Esas luces me hacen ver que no existe una salida, que solo consigo quedarme solo sabiendo a qué sabe el amor y sin poder tenerlo de ninguna manera, que siempre menosprecio lo que he conseguido y no llego a ningún lado, añoro la vida en la que lo tenía todo, me tenía a mí, ahora hablo conmigo y digo;  reacciona  a veces sí, y otras no lo consigo pero la vida, la enfermedad nunca se cansa.

Anónimo-259117 · Accepted Answer

Hola, Gus.  Te voy a contar un cuento:  Había un señor barrendero que tenía que barrer todo un estadio de fútbol! Cada mañana se levantaba y miraba el campo de fútbol, grandísimo como era, y se desanimaba. Barría toda la mañana refunfuñando por todo el trabajo que había que hacer, y cuando terminaba, estaba cansado y malhumorado.   Hasta que un día, una amiguita suya -una niña, solo los niños tienen una sabia visión de las cosas-, le invitó a hacerlo de otra forma: piensa solamente que tienes que barrer el aquí a esa lámpara, un pequeño trozo de dos metros cuadrados. No veas todo el campo de fútbol de una sola vez, concéntrate en esta pequeña meta.   Y así lo hizo. Barrió hasta la farola, ágil y contento, y cuando llegó ahí, se puso una nueva meta: voy a barrer de aquí, hacia la siguiente farola...  Concentrado en su trabajo, de pronto echó la vista atrás, y se encontró un trozo enorme el campo de fútbol ya limpio y barrido. Lo había hecho él, y ni siquiera se había cansado!  Querido Gus, es verdad que tienes mucho trabajo por delante, es lo que tiene la vida, siempre está en movimiento. Yo te propongo que organices tus prioridades, y te concentres en una meta a la vez. Las demás necesidades que necesitas cubrir van a seguir ahí, pero ayuda tener paciencia, y prometerte a ti mismo que las vas a resolver todas, de una por una, porque con ayuda es posible.  Así que, a buscarse un terapeuta. Un abrazo y mucha fuerza para ti.   Psic. Adriana

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