¿Afecta el cambio de tiempo en nuestro ánimo?

¿Afecta el cambio de tiempo en nuestro Ánimo? Que prefiero invierno o verano para estar feliz.

La mayoría somos conscientes de que el clima influye en nuestro estado de ánimo.De hecho, nos afecta en cierto modo la llegada del calor o los días lluviosos o grises, por ejemplo. Pero, ¿cómo funciona realmente este impacto? ¿Es algo meramente psicológico o tiene el tiempo un efecto real sobre nuestro organismo?

Cuando entra el invierno el frío lleva acompañado el llamado Trastorno Afectivo Estacional (SAD, en ingles), este refiere tristeza, desanimo, falta de motivación o decaimiento. Se cree que los que sufren este trastorno, lo que realmente les afecta es la falta de luz, causante de la bajada significativa de la serotonina, hormona que regula nuestro estado anímico.

Si bien es cierto que no todo el mundo lo sufre en la misma medida sino hablaríamos de depresión de invierno en toda la población, ahora bien, lo que si está comprobado es que si tienes un buen día, es probable que el mal tiempo no te afecte demasiado. Pero si te sientes mal ya desde que te levantas, un día triste y frío podría fácilmente hacer que tu estado de ánimo vaya de mal en peor.

Contrariamente a esto, diversos estudios han sugerido que el sol y las temperaturas más altas podrían estar relacionados con pensamientos suicidas y las tasas de suicidio más altas, incluso a pesar de la asociación general de los meses más fríos con la tristeza y el aislamiento.

Paralelamente otros estudios encontraron un vínculo entre la violencia y el calor, así como con las lluvias extremas. En estas circunstancias los conflictos intergrupales (guerras, conflictos armados) subieron un 14% mientras que los casos de violencia interpersonal (violaciones, violencia doméstica, homicidios) aumentaron un 4%.

Teniendo en cuenta que se espera que la temperatura global aumente en las próximas décadas, el panorama es desolador.

Ahora bien, la mayoría de la gente prefiere los climas templados. De hecho se correlacionan las temperaturas medias más cálidas en el invierno y las temperaturas medias más bajas en el verano con un aumento de los niveles de felicidad generalizada. Además, los inviernos suaves y los veranos más fríos hacen que sea fácil de conseguir disfrutar del aire libre durante todo el año, no solo porque facilitan la actividad física, sino porque pasar tiempo al sol se ha asociado a menores niveles de estrés y el aumento de bienestar.

Sabiendo todo esto,¿Voy a permitir que el cambio climático cambie o condicione mi estado anímico a diario? O voy a tomar conciencia de cómo me afectan a mi esos cambios y trabajar en terapia el cambio de actitud y creencia negativa para que en lugar de dejarme llevar por la pereza en esas tardes largas y frías de invierno, poniendo excusas para hacer sofing e hincharme a comer dulces, ser capaz de sacar provecho a todo ese tiempo y realizar ejercicio en casa, labores pendientes, o abrigarme y disfrutar de la nieve o la lluvia!!...Convéncete sin cambio no hay mariposa, ¡ni crecimiento!

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