¿Cómo saber si sufro de narcolepsia?: 5 Síntomas de la 'enfermedad de quedarse dormido/a'

La narcolepsia, también conocida de manera popular como la ‘enfermedad en la que te duermes’, se caracteriza por un sueño repentino e incontrolable que afecta a aquellos que la sufren. La característica esencial de la narcolepsia son las sistas diuras recurrentes o los lapsus de sueño. Pero, ¿Cómo se puede tratar este trastorno?

¿Qué es la narcolepsia? Definición

La narcolepsia se trata de un trastorno del sueño que implica que las personas que los sufren tengan una somnolencia diurna crónica y excesiva. De hecho, se trata de una condición neurológica que afecta la capacidad que tiene nuestro cerebro para manejar el ciclo del sueño y de la vigilia.

Las personas con este sueño repentino suelen presentar muchas dificultades para mantenerse despiertos durante períodos prolongados, sin importar la hora del día o aquello que están realizando. Es por este motivo que esta afectación puede tener un gran impacto en la persona que la sufre, ya que impide realizar correctamente las actividades del día a día.

¿Cómo saber si sufro de narcolepsia? Síntomas de la narcolepsia

Según los psicólogos y médicos, los síntomas más comunes de la narcolepsia incluyen lo siguiente.

• Somnolencia diurna: La narcolepsia implica en todos los casos una somnolencia diurna excesiva. De este modo, una persona que sufre de este sueño repentino puede tomar diversas siestas durante el día e incluso acabar durmiéndose de manera repentina.  Este tipo de síntomas de la narcolepsia ocurre a pesar de que la persona durmió la noche anterior.
• Parálisis del sueño: Cuando una persona sufre de parálisis del sueño, se despierta sin la capacidad de mover ningún músculo del cuerpo. Se trata de una medida de protección que tiene nuestro organismo para que no nos movamos durante el sueño REM. En el caso de un narcolépsico/a puede experimentar muchas parálisis del sueño debido a que pasan a la fase REM del sueño de forma casi inmediata.
• Alucinaciones: Experimentar mucho sueño durante todo el día también puede causar que las personas acaben sufriendo de alucinaciones, lo que implica ver, sentir y oír hechos que no están sucediendo realmente. Aproximadamente, el 20-60 % de los sujetos presenta alucinaciones vívidas antes de dormir o al quedarse dormidos, o justo después de despertarse (ilusiones auditivas, visuales o táctiles). Estas alucinaciones son distintas de la actividad mental onírica que aparece al comienzo del sueño en los durmientes normales. Las pesadillas son frecuentes en la narcolepsia así como la sensación de sueño vivido.
• Despertar repentino: Normalmente, aquellos que sufren esta ‘enfermedad de quedarse dormido’ suelen tener problemas para dormir durante toda la noche.
• Cataplexia o Cataplejía: Son episodios breves de pérdida súbita y bilateral del tono muscular. Duran minutos o incluso segundos y se desencadenan por emociones, típicamente por la risa y las bromas. Los músculos que se ven afectados pueden ser los del cuello, la mandíbula, los brazos, las piernas o todo el cuerpo, dando como resultado la oscilación de la cabeza, la caída de la mandíbula e incluso caídas totales. Durante la cataplejía, los sujetos están despiertos y son conscientes. En el caso de los niños pueden producir muecas o caída de mandíbula.  
• Conductas automáticas: Cuando la narcolepsia es grave, pueden aparecer conductas automáticas y el individuo puede continuar sus actividades de manera semiautomática, como abotargado, sin memoria ni consciencia.

La narcolepsia es un trastorno del sueño que acaba limitando mucho la vida de aquellos que la sufren. De hecho, muchas personas acaban sufriendo problemas psicológicos debido a experimentar de este trastorno. En estos casos, la consulta con un profesional de la psicología es primordial.

Causas de la narcolepsia

Actualmente aun no existen suficientes evidencias para apuntar hacia las causas exactas de la narcolepsia. A pesar de ello, existen estudios que apuntan a que hay algunos factores que incluyen en el desarrollo de esta enfermedad.

Parece bastante demostrado que la narcolepsia-cataplejía casi siempre es el resultado de la pérdida de las células productoras de hipocretina hipotalámica (orexina) que causa deficiencia de hipocretina. La pérdida de células es probablemente de origen autoinmunitario y aproximadamente el 99 % de los sujetos afectados es portador del HLA-DQB1.

Una explicación de la narcolepsia radica en la pérdida del neurotransmisor específico llamado hipocretina. Esta sustancia química juega un papel muy relevante en la regulación de nuestro ciclo del sueño/vigilia así como durante el transcurso de la fase del sueño REM.

Las razones exactas ante la pérdida de hipocretina no se comprenden completamente, pero las investigaciones creen que esto puede deberse a problemas autoinmunes. Debido a una combinación de causas genéticas y ambientales, el sistema inmunológico del cuerpo se activa para atacar las células que contienen este mensajero químico.

Además también existe una posible influencia de factores ambientales. Las infecciones de garganta por el estreptococo del grupo A, el virus de la influenza  u otras infecciones invernales son probables desencadenantes de un proceso autoinmune que produce narcolepsia unos meses más tarde.

Los traumatismos craneales y los cambios bruscos en los patrones de sueño-vigilia (p. ej, los cambios laborales, el estrés) pueden ser desencadenantes adicionales.

Tipos de narcolepsia

Según aquellos que investigan este trastorno del sueño, existen diferentes tipos de narcolepsia según la presencia o ausencia de algunos síntomas específicos.

• Narcolepsia tipo 1: Antes conocida como cataplejía. Las personas que sufren este tipo de narcolepsia sienten mucho sueño durante todo el día, junto a la cataplejía.
• Narcolepsia tipo 2: Esta era conocida anteriormente como narcolepsia sin cataplejía. Son aquellas personas que no experimentan de cataplejía en su narcolepsia.

Tratamiento de la narcolepsia

No existe una cura para la narcolepsia ya que hay evidencias que indican que la pérdida de hipocretina es irreversible. Sin embargo, existen algunas medidas médicas y psicológicas que pueden controlar la conocida como la ‘enfermedad de quedarse dormido’.

• Medicamentos: Normalmente el tratamiento de la narcolepsia incluye una serie de medicamentos para tratar el déficit de la hipocretina.
• Terapia: Los efectos que tiene la narcolepsia y el sueño repentino que las personas experimentan debido a ella puede acabar comportando algunas afectaciones a nivel psicológico. Por ello, parte del tratamiento también se debe realizar junto a un psicólogo profesional. Los trastornos del sueño se acompañan con frecuencia de depresión, ansiedad y cambios cognitivos que deben tenerse en cuenta en la planificación del tratamiento y en su manejo. Además, las alteraciones persistentes del sueño (tanto el insomnio como el exceso de sueño) son factores de riesgo establecidos para el desarrollo posterior de enfermedades mentales y trastornos por consumo de sustancias. También pueden representar la expresión prodrómica de un episodio de enfermedad mental, posibilitando la intervención temprana para evitar o atenuar el episodio completo.

Narcolepsia y muerte

Aunque las personas que experimentan la narcolepsia no tienen un riesgo de muerte debido al trastorno y sus efectos en el cuerpo, la realidad es que el sueño repentino si puede ser peligroso en determinadas ocasiones. A pesar de ello, junto a los medicamentos y la terapia se puede vivir de manera controlada la narcolepsia.

¿Cómo se puede vivir con narcolepsia?

Las personas con narcolepsia deberían evitar aquellos trabajos que les puedan poner en peligro a ellos mismos (p. ej., trabajar con maquinaria) o a los demás (p. ej., conductor de autobús, piloto). Una vez que la narcolepsia se controla mediante tratamiento, los pacientes normalmente pueden conducir, aunque no deben recorrer grandes distancias solos. Según los psicólogos, diferentes cambios en el estilo de vida pueden ayudar a las personas con narcolepsia a controlar mejor todos sus síntomas. Algunos de los cambios que se pueden hacer son los siguientes.

1. Hacer ejercicio todos los días
2. Tomar siestas breves durante el día.
3. Cumplir con un horario de sueño regular
4. Evitar fumar, la cafeína y el alcohol.
5. No comer comidas abundantes antes de acostarse
6. Seguir una rutina nocturna relajante

Las personas sin tratamiento también pueden estar en riesgo de aislamiento social. Las relaciones sociales pueden deteriorarse, ya que estos sujetos se esfuerzan en evitar la cataplejía controlando sus emociones, evitando la risa o la broma. De esta forma a través de la atención médica y psicológica necesaria las personas con esta ‘enfermedad de quedarse dormidos’ pueden realizar una vida normal y disfrutarla sin sufrir todos los efectos de la narcolepsia.

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