Corazón partido

Todos hemos sufrido algún momento en nuestras vidas en el que hemos sentido que algo se desmoronaba por dentro, momentos en los que nos hemos sentido decepcionados de la vida y de aquellas personas a las que nos hemos entregado con más voluntad y ánimo, o de aquellas personas de las que esperábamos más porque también las hemos tenido en mayor estima.

Cuando experimentamos el fruto de una promesa que se ha quebrado con el paso de los años, de una lealtad derribada, de un desengaño que ha sido el resultado de mentiras poco piadosas,… es indescriptible el dolor que podemos llegar a sentir, hasta el punto de convertirse en un duro trance de duelo.

Hollywood nos muestra películas de desengaño en el ámbito familiar, de la amistad o de la pareja; sin embargo, una película no se compara a la experiencia de vivir una situación así en carnes propias. Sentirse como un juguete roto, con el que han jugado, el cual no han valorado y han rechazado, es algo que difícilmente puede trasladarse al mundo de las palabras.

Lo que está claro es que no hemos venido enseñados a este mundo y, en la gran mayoría de ocasiones, no estamos preparados para hacer frente a la decepción. La decepción se suele expresar a través de la unión de melancolía y rabia, produciendo desorientación, conductas autodestructivas, miedo a la vulnerabilidad y desesperanza.

Consejos para afrontar un desengaño amoroso

Ante este conglomerado emocional, en un momento así, es más importante que nunca trabajar nuestra inteligencia emocional. ¿Cómo trabajar nuestra inteligencia emocional? Aquí te proponemos unos sencillos consejos:

1. Enfrenta la decepción

Exprésa tus sentimientos y argumentos a la persona que te ha dañado. El silencio te puede condenar a un sentimiento de indefensión que no es nada recomendable. Está es la única forma de poner e valor tu autoestima.

2. Haz una lista al menos 10 cosas positivas que hay en tu vida

En ella podrás incluir el nombre de personas en las que confías, lo cual te ayudará a no generalizar los males que has experimentado y a seguir manteniendo la esperanza en el futuro.

3. Busca momentos en compañía

El aislamiento es desaconsejable, es necesario que pases tiempo con compañías de calidad con las que poder abrirte si tienes necesidad de hacerlo y puedan comprenderte.

4. No busques la evasión, busca la tranquilidad

La evasión y la hiperactividad no son un buen remedio para salir del duelo que produce la decepción, pues son conductas que provocarán un efecto rebote, emocionalmente hablando. En la tranquilidad es que podrás tomar una perspectiva vital clara.

5. Acepta tu vulnerabilidad

El mundo está lleno de personas fantásticas y, si no aceptas que para ganar hay que arriesgar, no llegarás a conocerlas. Es necesario que vuelvas a confiar en las personas.

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