Entendiendo qué es la ansiedad

A diario oímos hablar de ansiedad. Parece que todo el mundo conoce lo que es, y mucha gente pelea con ella constantemente, pero también es cierto que a diario recibo a personas en consulta que su idea de ansiedad es tremendamente abstracta. Suelen decir cosas como "es algo que te hace sentir muy mal", "no te deja pensar" o "notas sensaciones muy desagradables".

Según la OMS, "la ansiedad es una emoción natural que comprende reacciones que tienen los seres humanos ante la amenaza de un resultado negativo o incierto". Vamos a entrar un poco en ella y a explicarla en los términos en la que la explicamos a nuestros pacientes/clientes.

Imagina que te encuentras en la época prehistórica y vas por la sabana. De repente, a pocos metros oyes un ruido, los arbustos se mueven y aparece un león gigante en posición de ataque. De repente notas algo en tu interior: el corazón se acelera, sientes mucho calor y los músculos se tensan. Percibes que estás en peligro y gracias a esta reacción actúas con rapidez y te subes a un árbol para salvar tu vida.

Esta misma secuencia ocurre hoy en día ante cualquier situación que nuestro cerebro interprete como amenazante. Evidentemente, el estímulo no va a ser ni siquiera parecido al contado con anterioridad, pero la secuencia sí lo será. Siempre que nuestro cerebro se siente amenazado, nuestro organismo piensa las mismas cosas, siente las mismas sensaciones y actúa de manera similar. Pues bien, ésto es lo que conocemos como ansiedad.

Al fin y al cabo, la ansiedad no es otra cosa que un mecanismo de supervivencia de la especie humana. Siempre que nos encontramos en peligro, nuestro cerebro lo activa, y nuestro organismo se pone en alerta para huir o afrontar la situación temida.

Nuestro cuerpo reacciona

Pasamos a enumerar algunas de las reacciones más comunes que podemos sentir cuando nuestro cuerpo activa este mecanismo:

• Aceleración del corazón.
• Respiración agitada o dificultad para llevarla a cabo.
• Sensación de tensión muscular.
• Calor
• Ver lucecitas o tener la percepción de oír más.

A pesar de ser un mecanismo de supervivencia y por lo tanto, algo bueno para nosotros y que nos va a proteger, resulta muy desagradable para quien lo padece. Por ello, es recomendable acudir a un profesional que sea capaz de asesorarte para poder eliminar tu problema.

Tipos de trastornos de ansiedad

A continuación pasamos a explicar los diferentes trastornos de ansiedad y una muy breve explicación de lo que es cada uno:

• Fobia social: miedo a afrontar situaciones que impliquen contacto social. El mayor temor es el miedo a lo que pensarán los demás.
• Trastorno obsesivo compulsivo: las personas se ven incapaces de controlar sus pensamientos, se ven invadidos por ellos. Para poder paralizar o reducir estas obsesiones, realizan lo que se conoce como rituales o compulsiones.
• Ansiedad generalizada: la persona se preocupa de manera desproporcionada y nada realista de dos o más áreas de su vida. Por ejemplo, de que a su hijo le va a pasar algo, a su marido, etc.
• Hipocondría: fuerte sensación de que se padece una enfermedad grave y que no le ha sido diagnosticada.
• Pánico-agorafobia: Un ataque de pánico es una aparición repentina de ansiedad, la cual se interpreta como que se va a morir, le va a dar un ataque al corazón, se va a volver loco, etc. Por otra parte, la agorafobia es el miedo a que se tenga un ataque de pánico en una situación en la cual no se puede salir o resulte embarazoso hacerlo.
• Estrés postraumático: revivir una y otra vez un suceso muy traumático. Se puede dar en forma de pesadillas, imágenes, etc.
• Fobia simple: Miedo exagerado a situaciones u objetos específicos.

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