Los 7 tipos de trastornos del estado de ánimo: ¿Cómo detectarlos?

Todos podemos experimentar malos días. De hecho, la vida suele ser una montaña rusa de emociones y sentimientos. Pero las personas que sufren un trastorno del estado de ánimo suelen verse tan afectadas por sus emociones que acaban viendo perjudicadas tanto sus actividades diarias como las relaciones con los demás. Pero ¿Por qué suceden estos trastornos afectivos?

¿Qué es un trastorno del estado de ánimo?

Los trastornos del estado de ánimo, también conocidos como trastornos afectivos, se caracterizan principalmente por un cambio en el estado anímico en las personas que lo padecen. De hecho, esta afectación en el ánimo acaba afectando tanto en la vida personal como profesional de aquellos que los padecen.

El término trastorno del estado de ánimo engloba a diferentes tipos de trastornos, los cuales su principal afectación implica cambios en el humor de las personas que los sufren. El trastorno afectivo que más afecta actualmente es la depresión.

Tipos de trastornos del estado de ánimo

Con la actualización del Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-V), los trastornos del estado de ánimo se clasifican en los siguientes:

1. Trastorno depresivo mayor: Más conocido como depresión mayor o depresión clínica. Este trastorno de los estados anímicos implica períodos donde la persona experimenta una sensación extrema de tristeza, desesperanza y vacío. En muchos casos, la depresión no sólo influye sobre el ánimo de aquellos que la padecen sino que además incluye una gran variedad de síntomas físicos, cognitivos y emocionales que acaban impidiendo el desarrollo normal en el día a día de la persona.
2. Trastorno bipolar I: Antes este trastorno era denominado ‘depresión maníaca’. Las personas con un trastorno bipolar tipo I suelen experimentar de episodios denominados manía seguidos de episodios depresivos. La manía se caracteriza por estados de ánimo eufóricos o irritables que implican un aumento en la energía o la actividad. Durante estos episodios maníacos, las personas que sufren de estos cambios en el estado de ánimo pueden llegar a participar en actividades que pueden llegar a tener muchas consecuencias dolorosas para ellos y para los demás.
3. Trastorno bipolar II: Una persona diagnosticada con este trastorno de la afectividad sufre de episodios denominados hipomanía, una condición menos grave de la manía, así como episodios de depresión mayor. 
4. Trastorno ciclotímico: Se trata de un trastorno del estado de ánimo que causa oscilaciones entre una fase de hipomanía y una fase de depresión. Durante la hipomanía las personas suelen volverse más productivas y creativas pero también desorganizas e ineficaces.
5. Trastorno de desregulación disruptiva del estado de ánimo: Se trata de un trastorno afectivo que afecta a menores de 18 años. Principalmente, aquellos que lo padecen suelen mostrar una conducta con irritabilidad e ira persistente. Además pueden llegar a tener episodios frecuentes de arrebatos de agresividad extrema a pesar de no tener ningún motivo para ellos.
6. Trastorno depresivo persistente: Las personas con estos cambios en el estado de ánimo experimentan un trastorno depresivo crónico, es decir, sienten apatía, tristeza y vacío que dura más de dos años, antes conocidos como distimia.
7. Trastorno disfórico premenstrual: Este trastorno del estado de ánimo afecta a las mujeres. Se basa en sentir cambios en el humor, así como irritabilidad, exceso de tristeza, ansiedad y tensión durante el período previo a una menstruación. Normalmente, estos síntomas desaparecen después de su inicio.

Síntomas de los trastornos afectivos

Los trastornos que afectan al estado emocional pueden llegar a causar muchas dificultades en la vida de aquellos que lo padecen. De hecho, muchas personas con trastornos afectivos pueden llegar a experimentar también síntomas físicos como por ejemplo dolores de cabeza o molestias en el estómago y la digestión. Además de ello, los trastornos en el estado de ánimo suelen incluir los siguientes síntomas:

• Pérdida del interés: Las personas que sufren de alguna afectación en el estado de ánimo suelen acabar perdiendo el interés en aquellas actividades que antes disfrutaban y hacían de buen gusto.
• Comer más o menos: Los trastornos del ánimo suelen afectar el apetito de aquellos que lo sufren.
• Trastornos del sueño: Estos cambios en el humor así como las otras afectaciones propias de un trastorno del ánimo puede llegar a afectar la calidad del sueño, haciendo que aparezcan dificultades para conciliarlo o se duerma en exceso.  
• Fatiga: Otro de los signos que pueden indicar que estamos ante un trastorno de la afectividad es el cansancio extremo debido a los cambios en los estados de ánimo.                                                                   
• Tristeza y culpabilidad: Las personas que sufren de estos altibajos emocionales o de un desánimo persistente suelen culparse por ello, además la tristeza y los llantos suelen estar presentes en muchos de sus días.
• Dificultad para concentrarse: Toda la apatía y la tristeza impide que las personas con un trastorno que afecta el ánimo puedan concentrarse. Esto acaba haciendo que no puedan cumplir con muchas tareas, algo que contribuye más a los sentimientos de culpa e inutilidad propios de un estado emocional patológico.
• Problemas para tomar decisiones: Las personas con un trastorno afectivo emocional suelen experimentar muchas dificultades ante la toma de decisiones ya sean importantes o no para su vida.
• Pensamientos de muerte y / o suicidio: Uno de los signos más alarmantes que pueden padecer las personas afectadas con los trastornos del estado de ánimo son los pensamientos alrededor del suicidio y la muerte.

Las personas con un trastorno emocional deben acudir a un psicólogo/a profesional para tratarlos. En muchos casos, estos trastornos pueden llegar a causar un peligro para las personas que los padecen.

Tratamiento de los trastornos afectivos

Son muchas las personas afectadas por los trastornos del estado de ánimo, a pesar de ello, si estas reciben un tratamiento de las manos de un profesional de la psicología pueden conseguir mejorar su calidad de vida. Principalmente, el tratamiento para un trastorno de afectividad incluye tanto psicoterapia así como medicamentos que ayudan a regular los desequilibrios químicos que suceden ante estas patologías en el cerebro.

Las informaciones publicadas por MundoPsicologos no sustituyen en ningún caso la relación entre el paciente y su psicólogo. MundoPsicologos no hace la apología de ningún tratamiento específico, producto comercial o servicio.