¿Qué son los TCA? 7 Formas de detectar los Trastornos de la Conducta Alimentaria

Existen muchos mitos alrededor del TCA o trastornos de conducta alimentaria. A pesar de que no existe mucha información estadística al respecto, la realidad es que el TCA como enfermedad afecta a más personas de las que podríamos imaginar. La alimentación es muy importante para tener una vida llena y feliz, por ello,  saber qué es un trastorno alimenticio es vital para evitar todos los efectos y problemas psicológicos o físicos que pueden ir relacionados con ellos. 

¿Qué es el TCA o trastornos de la conducta alimentaria?

Los trastornos alimentarios son enfermedades que padecen las personas que acaban con alteraciones graves en sus conductas alimentarias, así como en todos los pensamientos y emociones relacionadas con la alimentación. Estas enfermedades alimentarias suelen llegar a tal extremo que acaban teniendo estragos muy visibles en el físico de una personas.

Los trastornos de conducta alimentaria afectan a muchas personas, siendo las mujeres entre 12 y 35 años las más afectas. Existen diferentes tipos de TCA, pero los más conocidos son principalmente la anorexia, la bulimia  y el trastorno por atracón. Son muchos los casos en los que un trastorno alimenticio ocurre junto a otros afectaciones psicológicas como puede ser la ansiedad, depresión y otras afectaciones. A pesar de que es una enfermedad dfícil de tratar, la realidad es que a través de la atención médica adecuada, las personas que reciben el tratamiento de TCA pueden volver a tener hábitos alimenticios adecuados y recuperar toda su salud. 

Tipos de TCA

El TCA no es solo un trastorno alimenticio, sino que existen diferentes variantes de esta patología psicológica.  Principalmente se reconocen los siguientes trastornos de la conducta alimentaria:

1. Trastorno por atracón: Este tipo de trastorno no es extraño sufrirlo ante momentos de ansiedad. Consiste en ingerir una gran cantidad de alimentos, normalmente de bajo nivel alimenticio y alto nivel calórico, a pesar de no tener hambre. Esta conducta causa vergüenza por lo que se suele hacer a escondidas o por la noche. Por lo general, produce sentimientos de culpa
2. Bulimia nerviosa: Uno de los trastornos de conducta alimentaria más conocidos es la bulimia. Se caracteriza generalmente por tener atracones incontrolados que van seguidos por conductas compensatorias. Las personas que lo padecen, recurren a conductas como vómito, ayuno o incluso ejercicio excesivo o uso de laxantes para compensar la ingesta excesiva de comida. Las personas que tienen este trastorno tienen una imagen distorsionada de si mismos y su cuerpo y mucha preocupación por el peso.
3. Anorexia nerviosa: Otro trastorno de la conducta alimentaria es la anorexia nerviosa. Está caracterizado por el intento de controlar el peso a través de una ingesta restringida de los alimentos. En muchos casos las restricciones acaban siendo tan severas que le lleva a tener un peso corporal muy bajo. A pesar de que esta deficiencia calórica se puede visualizar en el cuerpo de la persona, la mayoría de pacientes que sufren de este trastorno alimentario acaban padeciendo una distorsión de su imagen corporal. Aunque la anorexia es el trastorno de la conducta alimentaria más conocido de la TCA como enfermedad, la realidad es que es el menos común.
4. Trastorno por evitación: Uno de estos trastornos nutricionales de conducta evitativa se caracteriza por la misma actitud que en la anorexia, pero en estos casos no hay una alteración de la imagen corporal de la persona que lo parece. De esta forma, se manifiesta a través de intentar evitar la satisfacción del hambre que se siente a lo largo del día. 
5. Ortorexia nerviosa: A pesar de que este no es un trastorno alimentario descrito en el Manual de Diagnóstico de los Trastornos Mentales, tiene mucha presencia en la actualidad. De esta forma, se diferencia de los demás trastornos alimenticios debido a que estos problemas no surgen por una obsesión para perder peso. Las personas que sufren de ortorexia se centran principalmente a tener una alimentación saludable hasta tal punto que puede ser contraproducente. 

Estos son los principales trastornos de la conducta alimentaria que podemos encontrar actualmente en nuestra sociedad. En cada uno de ellos, es necesaria la intervención de un psicólogo profesional para solucionarlos. 

Síntomas de los TCA 

Cada uno de estos trastornos de conducta alimentaria tienen diferentes síntomas que pueden variar mucho de uno a otro. Principalmente, estas enfermedades alimenticias se pueden detectar cuando existe angustia o comportamientos obsesivos alrededor de la imagen corporal, del peso y de la comida. A pesar de que son diferentes las unas a las otras, existen unos síntomas comunes a todas ellas.

• Restricciones en la dieta
• Cambios en el peso
• Imagen corporal negativa
• Atracones
• Ejercicio excesivo
• Uso de laxantes o diuréticos
• Pensamientos obsesivos con la comida, imagen corporal y el peso

Si presentas muchos de estos síntomas, es muy probable que estes padeciendo trastornos de conducta alimentaria. En ese caso será vital acudir a un psicólogo profesional. 

Causas de los trastornos de la conducta alimentaria

Un trastorno de la alimentación es una enfermedad muy compleja. El origen de los TCA es multifactorial. A los estándares muy altos de belleza de la sociedad actual, se le suman otros factores de origen genético, psicológico y de relaciones familiares o personales que pueden influir. Existen además, algunos factores de riesgo:

• Abuso sexual
• Acoso escolar (bullying) o laboral (mobbing)
• Hacer dieta
• Traumas
• Enfermedad mental
• Mayor predisposición en la adolescencia
• Obesidad en la niñez
• Estrés 

Estos pueden ser algunos de los desencadenantes que puede generar un trastorno de conducta alimentaria o TCA. 

¿Cómo detectar el TCA o los trastornos de la cconducta alimentaria?

Los trastornos de conducta alimentario son enfermedades muy graves que pueden acabar con la vida de una persona. Tanto es así que en muchos casos, detectarlos es clave para evitar que acabe en una situación peligrosa para el enfermo. De esta forma, podemos detectar un trastorno de alimentación a través de las siguientes señales.

1. Cambios o pérdida de peso sin estar enferma: Obviamente, uno de los síntomas más visibles de estas enfermedades alimenticias es la pérdida o aumento de peso desproporcionado. En muchos casos las personas que padecen de algunos de los tipos de trastornos alimenticios que hemos señalado, acostumbran a vestir con ropajes anchos ya que suelen tener una distorsión corporal. Por ello, puede parecer difícil detectarlo ya que los que lo padecen tienden a esconderlo. 
2. Actitudes extrañas en la comida: Otro de los factores que nos pueden hacer ver que una persona está padeciendo un TCA o trastorno de conducta alimentaria, son aquellas actitudes extrañas o raras alrededor de las comidas. De esta forma, las personas que sufren TCA como enfermedad acaban evitando comer en grupos o en familia o evitan a toda costa comer delante de los demás. 
3. Aislamiento social: A veces las personas que padecen de los trastornos de conducta alimentaria pueden llegar a tener ciertas actitudes relacionadas con la ansiedad social. Esto es debido a su autopercepción errónea sobre su cuerpo e imagen. Tanto es así que acaban evitando que los demás les vean el cuerpo. 
4. Quejas alrededor del cuerpo: A pesar de que las personas que sufren enfermedades alimenticias de este estilo acostumbran a ocultar su problema, la realidad es que estás tienden a generar excesivas críticas alrededor de su cuerpo. 
5. Baja autoestima: La distorsión alrededor de su cuerpo no sólo es a nivel físico sino que mentalmente estas personas sufren también de una baja autoestima. En muchos casos una mala conducta alimentaria viene precedida de un exceso de autocrítica y una visión negativa de sí mismo. 
6. Cambios en el carácter: En muchos casos, un trastorno de la alimentación acaba teniendo un efecto muy perjudicial en el carácter de la persona. Aquellos que lo padecen pueden acabar con un mayor nerviosismo, irritabilidad y agresividad ante diferentes situaciones relacionadas con la comida. 
7. Desaparición de comida: En la bulímia o en los atracones compulsivos, las personas acaban comiendo una cantidad de comida excesiva. Tanto es así que estos individuos pueden llegar a esconderse de los demás al comer. En estos casos, la familia puede detectar una falta de comida constante. 

Cuando surge un trastorno alimenticio o hay las sospechas de una de estas enfermedades alimentarias, es esencial intentar contar con la ayuda de un psicólogo profesional para tratar de abordarlas antes de que supongan un problema mayor. 

¿Cómo prevenir los TCA o trastornos de la conducta alimentaria?

A pesar de que los TCA son enfermedades con origen multicausal, como padres o familiares podemos seguir una serie de recomendaciones para trasladar un modelo de hábitos y conductas alimentarias saludables.

1. Potenciar la autoestima: Una de las maneras de poder tratar los trastornos alimentarios es principalmente fomentando nuestra autoestima. De esta forma, debemos trabajar en nuestro interior para aceptar nuestros defectos y centrarnos en nuestras virtudes. 
2. Favorecer una imagen corporal positiva: Existen personas que han recibido mucha influencia a tender hacia un modelo corporal completamente erróneo. Por ello, podemos fomentar una imagen corporal positiva intentando remarcar junto a la ropa o el ejercicio físico nuestros rasgos más visibles. 
3. Realizar comidas con la familia y amigos: Una de las maneras más efectivas para tener un tratamiento del TCA es intentar comer con la familia, amigos o compañeros del trabajo. De esta forma, al comer con los demás estos trastornos conductuales se minimizan.
4. Explorar un nuevo pasatiempo: En muchos casos encontrar un nuevo pasatiempo puede hacer que nos dejemos de centrar en todos los pensamientos negativos que hay alrededor de los trastornos de conducta alimentaria o TCA.
5. Practicar la meditación: Tener más conciencia corporal y mental puede ayudarnos a entender la realidad desde una perspectiva menos subjetiva ya que los trastornos de conducta alimentaria provienen de una enfermedad relacionada con los pensamientos negativos u obsesivos.

A pesar de que estos pueden ser algunos buenos métodos para abordar los diferentes tipos de trastonos de conducta alimentaria, la realidad es que debemos tener siempre presente la ayuda de los profesionales de la psicología.

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