¿Soy un misántropo/a? 9 Signos de que tienes un odio a la humanidad

Ser un misántropo significa tener un odio a la humanidad de forma natural sin una razón aparente. La misantropía es una actitud en que las personas acaban evitando a las otras personas ya que no les gusta su compañía. Pero, ¿Este tipo de pensamientos son la señal de que algo va mal dentro de ti? Descubre la verdad detrás de este tipo de actitudes.

¿Qué es un misántropo?

El significado de misántropo proviene de una palabra griega que significa literalmente ‘odiar a los humanos o a la gente’. De esta forma, la misantropía hace que las personas eviten la interacción humana todo lo que les sea posible.

El hecho de ser misántropos no implica que la persona en cuestión sea mala u odiosa en general. A pesar de ello, su misantropía hace que eviten a las personas siempre que tengan esa oportunidad.

Señales que indican que eres un misántropo/a

Existen una serie de señales que delatan la misantropía en una persona. Según los psicólogos los misántropos tienen las siguientes actitudes.

1. Piensas que la mayoría de gente es idiota: Una señal infalible de que eres un misántropo/a es que siempre tienes la tendencia de pensar que los demás siempre hablan de tonterías. Esto es debido a que a las personas misántropas suelen no querer lidiar con las conversaciones que no llegan a ningún lugar.
2. Odias a las personas dramáticas: Un misántropo o una misántropa suele detestar el drama y las personas que lo causan. Por lo tanto, intentan evitar todas las situaciones en las que este puede estar presente, además ellos jamás serán los responsables de crear una situación así.
3. Eres solitario/a: Este ‘odio al ser humano’ hace que las personas con misantropía prefieran pasar tiempo a solas. Tanto es así que antes que ir a una fiesta, un misántropo/a preferirá mil veces estar en su casa leyendo o pasando tiempo junto a sus hobbies. Es decir, los misántropos suelen preferir pasar tiempo a solas en lugar de salir con otras personas, sin importar quién sea.
4. No usas redes sociales: Tener un perfil en redes sociales es lo último que haría un misántropo. En la misantropía uno de los síntomas más comunes es precisamente evitar a toda costa comunicarse o tener una interacción junto a los demás.
5. No soportas a los niños/as: Un misántropo o misántropa tiene odio a los humanos tengan la edad que tengan. Pero, en el caso de los niños su odio a la sociedad se acentúa aún más. Estas personas no encuentran a los niños adorables en lo más mínimo, y siempre tienden a evitarlos con más proporción que a las demás personas.
6. Eres muy directo/a: El significado de misántropo/a implica ser demasiado transparente con los demás. En muchos casos, eres tan sincero/a que acabas haciendo que los de tu alrededor se puedan sentir incómodos ante tus palabras. Es decir, la misantropía implica dejar atrás el filtro social que todos tenemos y que nos impide decir las cosas que podrían ofender a los demás, a pesar de que sean ciertas.
7. Tienes dificultades para hacer nuevos amigos/as: Un misántropo/a suele tener muchas dificultades para conectar junto a los demás. La razón de ello es que su actitud suele molestar a las personas y por esta razón la mayoría de ellas se alejan de sus palabras tan sinceras o de su actitud evitativa.
8. Prefieres no tener relaciones amorosas: A pesar de que los misántropos pueden sentirse solos, la realidad es que tienden a evitar a toda costa empezar una relación amorosa con una persona. La razón de ello es que este tipo de vínculos implican estar mucho tiempo y dedicar muchas horas a otra persona, algo que un misántropo o misántropa evitará a toda costa.
9. Tienes un trastorno de ansiedad: Diferentes estudios han demostrado que los misántropos suelen tener algún tipo de trastorno de ansiedad. A pesar de que no es algo común en todos los casos de misantropía, las investigaciones han demostrado que suele estar muy relacionado.

¿Es la misantropía una enfermedad mental?

Aunque este odio a la gente puede parecer sinónimo de un trastorno mental, la realidad es que dentro de la comunidad científica la misantropía no es considerada una enfermedad. Aun así, en muchos casos una persona misántropa suele presentar síntomas de un trastorno límite de la personalidad, de depresión o de ansiedad. Aparte de este hecho, en muchos casos los misántropos pueden vivir una vida completamente normal, a pesar de que suelen tener pocas relaciones con los demás.

Según los psicólogos la misantropía puede resultar perjudicial cuando el autoaislamiento crea estragos debido a la soledad. Esto es debido a que muchos estudios han demostrado que la soledad puede tener impactos similares en nuestra salud al nivel de la obesidad o de fumar cigarrillos diariamente.

Además, una desconfianza o un odio al ser humano de manera generalizada pueden llegar a causar un mayor estrés. En estos casos en que esta actitud misantrópica crea malas sensaciones o sentimientos, es necesario solicitar la ayuda de un profesional para que no desencadene en un trastorno.  

¿Cómo dejar de ser tan misántropo/a?

Si crees que eres un misántropo/a y que ello te está afectando, los psicólogos pueden darte consejos para trabajar en tu conexión hacia los demás. Principalmente, puedes seguir los siguientes consejos.

• Ríe en vez de odiar: En vez de tener odio a las personas, intenta sacarle el lado humorístico a estas sensaciones de desprecio. De esta forma, dejarás de fijarte en los rasgos negativos de los demás para enfocarte en algo más positivo.

• Céntrate en las personas positivas: Es normal que sientas este odio a la gente si solo te fijas en aquellas personas que generan malestar hacia los demás. En estos casos, intenta acercarte a los individuos que son más positivos tanto en su actitud como tratando a los demás.
• Sal de tu zona de confort: A veces procesamos este odio a las personas por qué nos da miedo afrontar nuestros propios miedos. Toma esto como una oportunidad para ser tu mejor versión e intenta salir de tu zona de confort para ver dónde están tus límites.

En muchos casos los misántropos suelen generalizar o prejuzgar ante la actitud de los demás. Por ello, es importante trabajar en tus pensamientos negativos ya sea junto tu trabajo personal o con la ayuda de un psicólogo profesional. Siempre habrá alguien que te sorprenderá.

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