¿Soy una persona altamente sensible (PAS)?: Test para detectar la alta sensibilidad

Algunas personas parecen tener los nervios en flor de piel. Estas personas tienden a ser más sensibles que aquellos/as que los rodean. La realidad es que existen personas que son más sensibles que otras y no solo a nivel emocional sino también en otros aspectos. Cuando esto sucede nos referimos a una persona altamente sensible (PAS). Pero, ¿cómo podemos saber si somos una persona PAS?

¿Cómo saber si soy una persona PAS?

El término PAS o persona altamente sensible fue descrito por primera vez por la psicóloga Elaine Aron en 1996. Según sus investigaciones, existen individuos cuyo cerebro funciona de manera diferente a los demás. De este modo, los estudios mostraron que las personas PAS procesan la información y reflexionan sobre ella más profundamente, haciendo que sean más conscientes de lo que ocurre en su entorno. Por este motivo, la alta sensibilidad implica ser más propenso/a a estar sobreestimulado/a debido a los fenómenos que pasan en el exterior.

Se estima que en la actualidad, entre el 15 y el 20% de la población puede encajar dentro de las características propias de las personas altamente sensibles. Además, las investigaciones realizadas alrededor de las personas PAS establece que este rasgo en la personalidad es innata y genética en lugar de aprendida o existente en un espectro. En los estudios de Aron (2010) se distinguió a las personas de alta sensibilidad con los siguientes rasgos:

• Profundidad de procesamiento: Las investigaciones han mostrado que una las personas altamente sensibles procesan la información con una profundidad mayor. Es decir, son más reflexivos y tardan más en tomar decisiones.
• Sobreactivación: Una persona altamente sensible tiende a percibir mucho más su entorno, ya sean las emociones de las personas de su alrededor, como los niveles de ruido, olor u otros aspectos del entorno. Esto puede ser ventajoso, pero también puede conducir a sentirse demasiado abrumados/as y hasta a padecer de estrés crónico.
• Intensidad emocional o empatía: Cuando una persona es de alta sensibilidad, suele experimentar más contundentemente las emociones, sean positivas o negativas. De esta forma, suelen ser individuos con una tendencia más empática hacia los demás.
• Sensibilidad sensorial: Los PAS o personas altamente sensibles suelen notar los estímulos ambientales con más facilidad, incluso aquellos más sutiles. Normalmente, las personas los pueden pasar por alto, pero las personas PAS tienden a no poder ignorarlos de la misma manera.

Estos son los rasgos principales que pueden indicar que una persona tiene una alta sensibilidad. Como resultado, las personas PAS suelen ser más empáticos, concienzudos y cautelosos, así como buscar más nuevas sensaciones y la novedad.

Además, otro dato a tener en cuenta es que, aunque el PAS o la alta sensibilidad no está alienado con la superdotación, existen investigaciones realizadas donde se ha mostrado que el 87% de las personas superdotadas son muy sensibles (Koolhof, 2020).

Otra de las características a tener en cuenta en alguien con una personalidad PAS es que suelen tener un sentido elevado de la estética, lo que les permite ser más sensibles a la belleza de la naturaleza y las artes. Por otro lado, también tienen una mayor sensibilidad a estimulos desagradable que otras personas.

Es decir, las personas PAS suelen sentirse más angustiadas por los entornos negativos a diferencia de las personas menos sensibles. Por lo contrario, también se pueden beneficiar de lo positivo. Normalmente, alguien con PAS o una alta sensibilidad suele requerir de psicoterapia para superar las dificultades de la infancia, ya que suele llevarles a padecer de una baja autoestima.

¿Soy una persona altamente sensible? Test PAS:

Si quieres comprender si realmente puedes tener este rasgo en la personalidad, este test de alta sensibilidad te permitirá conocerlo:

1. Soy consciente de los matices sutiles de mi entorno.
2. Me afecta el estado de ánimo de los demás.
3. Soy muy sensible al dolor.
4. Necesito aislarme en aquellos días en los que he tenido muchos estímulos, ya sea en la cama, en una habitación o en cualquier lugar donde pueda estar tranquilo/a y libre de estímulos.
5. Soy particularmente sensible a los efectos de la cafeína.
6. Me abruman fácilmente las luces brillantes, los olores fuertes, la ropa áspera o los sonidos de sirenas cercanas.
7. Tengo una vida interior rica y compleja.
8. Me molesta el ruido.
9. Las artes y la música despiertan en mí una emociones profundas.
10. Soy una persona concienzuda.
11. Me sobresalto con facilidad.
12. Me irrito cuando tengo mucho que hacer en poco tiempo.
13. Cuando otros/as se sienten incómodos/as en un entorno, generalmente siento lo que debo hacer para que estén mejor.
14. Pierdo el control cuando la gente intenta obligarme a hacer demasiadas cosas a la vez.
15. Realmente trato de evitar cometer errores u olvidar.
16. Me aseguro de evitar películas y programas que contengan escenas de violencia.
17. Me estreso cuando suceden muchas cosas a mi alrededor.
18. El hambre me provoca una gran reacción, afectando mi concentración y mi estado de ánimo.
19. Los cambios en mi vida me agobian.
20. Noto y aprecio olores y sabores delicados, ruidos suaves, obras de arte sutiles.
21. Hago todo lo posible para evitar situaciones perturbadoras.
22. Cuando tengo que competir con otros/as o cuando la gente me mira mientras trabajo, pierdo los estribos y obtengo un resultado mucho peor que cuando me dejan solo/a.
23. Cuando era niño/a, mis padres o maestros parecían pensar en mí como sensible o tímido/a.

Resultado: Si das más de 14 respuestas afirmativas, es probable que seas una persona altamente sensible. Aun así, es importante destacar que ninguna prueba puede determinar este rasgo de la personalidad. La mejor forma de conocer si eres un/a PAS es a través de la ayuda de un psicólogo/a profesional.

¿Qué hacer si somos una persona altamente sensible?

Ser altamente sensible puede implicar tanto experimentar más alegrías o sentir más tristeza e incluso desesperación. De este modo, la clave para gestionar la alta sensibilidad es precisamente la autorregulación emocional, intentando reconocer aquellos factores que nos sobreestimulan.

Sin embargo, las personas PAS suelen ser más propensas a sentirse agotadas debido al estrés crónico causado por la sobreestimulación combinada con el perfeccionismo y la empatía excesiva.

Para mediar con ello, las personas con alta sensibilidad deben descansar lo suficiente y tener en cuenta que tener un tiempo de inactividad es esencial para mejorar sus fortalezas. Es relevante entonces saber poner límites y aprender a decir que no a los demás para minimizar los efectos negativos.

Es recomendable acudir a terapia para aprender a manejar las emociones y la sensibilidad de los PAS.

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