Vaginismo y dispaurenia (dolor en la penetración): causas y concepto

Vaginismo y dispaurenia, concepto y causas. El dolor coital y la contracción vaginal que impide la penetración, el vaginismo, tienen cura en terapia sexual.

31 MAR 2014 · Última modificación: 9 SEP 2015 · Lectura: min.
Vaginismo y dispaurenia (dolor en la penetración): causas y concepto

¿Qué es el vaginismo, y la dispaureunia (dolor en la penetración)?

El vaginismo es una contracción involuntaria de los músculos del tercio inferior de la vagina que realiza la mujer inconscientemente al intentar ser penetrada y que la imposibilita para el coito. Anatómicamente, los genitales de la mujer que padece vaginismo son normales.

Sin embargo, en el momento en que se intenta la penetración, la vagina se cierra literalmente de golpe, hasta el punto de que es imposible el acto sexual o introducir cualquier otra cosa. De ahí que el vaginismo sea una causa corriente de matrimonios no consumados, incluso después de muchos años. El vaginismo se debe a un espasmo involuntario de los músculos que rodean la entrada vaginal que se da siempre que se intenta introducir un objeto en el orificio vaginal. Además del espasmo primario de la entrada vaginal, las pacientes con vaginismo suelen ser fóbicas al coito y a la penetración en la vagina. Esta evitación fóbica hace que los intentos de coito sean desagradables y dolorosos. A menudo es una reacción secundaria al vaginismo primario, pero hay veces en que la fobia de penetración precede al vaginismo.

Dado que este trastorno excluye por completo el acto sexual, rara vez se le tolera con resignación. El vaginismo puede ejercer un efecto psicológico devastador, no sólo sobre la mujer, sino también en el hombre. La mujer se halla normalmente atrapada en el dilema de necesitar ayuda, por un lado, y de estar atemorizada ante una posible curación, por otro. Aparte de que los esfuerzos de la pareja para penetrar en una vagina cerrada pueden causarle a ella un gran dolor físico, puede que la mujer se sienta aterrorizada, humillada y frustrada por estos intentos. Los repetidos fracasos en el coito pueden dar además lugar a sentimientos de inadecuación, especialmente en mujeres jóvenes; el miedo a ser abandonada por su pareja podría también ser movilizado por estas experiencias. No es sorprendente que estas mujeres intenten evitar todo contacto sexual. Cualquier intento de penetración vaginal evoca intensa ansiedad, tensión y rabia, y estos sentimientos adversos sólo cesan cuando se aleja el "peligro" de penetración.

Tales contingencias, y especialmente el hecho de que la ansiedad desaparece al cesar los intentos de penetración refuerzan la pauta de evitación, lo cual a su vez sirve para mantener el síntoma de vaginismo. Esta evitación fóbica constituye el obstáculo para el éxito del tratamiento

Causas psicológicas del vaginismo, dispaurenia y problemas con la penetración

Son múltiples las causas psicológicas que pueden provocar vaginismo por eso es importante realizar en una primera visita con el terapeuta sexual un diagnóstico detallado del caso. Pueden incidir numerosos factores en su origen, a veces uno, otras veces se puede acompañar con varios. Entre las causas más comunes que provocan el vaginismo nos encontramos:

  • Miedo al dolor.
  • Miedo al fracaso, inseguridad sexual.
  • Obligación de intentar la penetración por la pareja (miedo a ser dejada).
  • Miedo al embarazo.
  • Miedo a contraer enfermedades de transmisión sexual.
  • Experiencias sexuales traumáticas (agresiones sexuales, reiteradas veces de intentar la penetación con dolor, etc.).
  • Complicación posterior a una lesión orgánica.
  • Situaciones de estrés.
  • Secuela de una intervención médico-quirúrgica.
  • Desavenencias conyugales.
  • Educación sexual recibida.

Blanca Isabel Soria

Psicoóptima

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Escrito por

Blanca Isabel Arranz

Licenciada en Filosofía y máster en terapia Psico-afectivo-sexual y de pareja. Formada en pedagogía y en sexología. Especializada en terapias de parejas (incomunicación, violencia verbal, infidelidad, celos obsesivos) y sexología (vaginismo, dolor coital, disfunción erectil, entre otras.)

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Comentarios 3
  • Sarahi Rodriguez

    Sufro de esa condicion y es terrible, mi pareja llego a ponerme un ultimatum en el que me dijo que si no podia darle a el lo que necesitaba, era mejor que lo dejaramos hasta ahi.

  • Empar Sánchez

    Un artículo estupendo, muy bien explicado y estudiado. Como mujer que sufre de vaginismo me siento muy comprendida y, al mismo tiempo, puedo entender mejor mi problema y mi cuerpo gracias a este artículo. Me gustaria encontrar propuestas que pudiesen ayudarnos a mejorar nuestra situación, como ejercicios musculares o psicológicos, que deberíamos saber sobre nosotras mismas para afrontar el problema, etc. Enhorabuena por el artículo!

  • José Luis

    Está bien pero, y la solución?

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