Vistos en imprevistos
Por mucho que nos empeñemos, no podemos controlarlo todo, la incertidumbre vive con nosotros/as. Por eso tenemos que saber vivir con imprevistos.
PUBLICIDAD

El tiempo está medido, parece imposible que lleguemos tarde: y entonces nos encontramos dentro de un atasco. O no arranca el coche. O no podemos salir de casa porque hay goteras o se ha roto el termo. Y todos los planes se vienen abajo. Momentos en los que parece que todo lo que hemos preparado el día anterior no servirá de nada y la sombra del estrés sobrevuela sobre nosotros/as.
¿Cómo actuar ante imprevistos?
No podemos saber con ninguna certeza qué va a pasar, ni cuándo ni de qué forma. Y mucho menos por qué, si es que puede averiguarse en algún momento. Al igual que no podemos evitar que llueva, ni podemos saber cuándo , podemos llevar con nosotros ( sobre todo si ya vemos que se acercan nubarrones) unos buenos paraguas para empaparnos lo menos posible .
Mis “paraguas” preferidos son los siguientes :
1. Contar con un tiempo 'extra'
Contar cada día en nuestra planificación habitual con un espacio de tiempo que funcione como margen, de manera que si surge un imprevisto que ocupa tiempo, no acabemos más tarde de lo que esperábamos. Si no surgen imprevistos, utilizaremos ese espacio para tareas que habitualmente retrasamos (actualizar las copias de seguridad del ordenador, limpiar, estudiar, hacer alguna llamada…).
2. Tener actitud flexible
Estar preparados para ser flexibles: si hoy no puedo salir a la calle, avanzaré una tarea que tenía programada para otro día que pueda hacer desde casa y ese día haré los recados que hoy el imprevisto me impide cumplir.
3. Permitirnos delegar en otras personas
No pasa nada por pedir un favor o retrasar una cita. Los demás siempre tienen la posibilidad de decir que no. Eso sí, intentaremos ser muy selectivos con esta opción para evitar que se repita de forma muy continua. También es importante estar dispuestos a corresponder con las personas que nos ayudan.
4. Comenzar las tareas con antelación
Comenzar con bastante antelación las tareas con las que sabemos que tendremos que cumplir en un momento determinado. Por ejemplo, los regalos de navidad se pueden ir empezando a comprar y preparar desde mucho antes porque conocemos las fechas … de esta manera sabemos que si tardamos más de lo que esperábamos en encontrar un regalo o tardamos en recibirlo por correo, tenemos un margen suficiente para llegar a tiempo.
5. Mantener la calma
Finalmente, mantener la calma. en el momento en que se presenta el imprevisto, por complejo que resulte en ese momento, recordar otras situaciones imprevistas que se han presentado y que finalmente se han resuelto con relativa sencillez y que a día de hoy no han tenido un impacto importante en nuestras vidas.
Las informaciones publicadas por MundoPsicologos.com no sustituyen en ningún caso la relación entre el paciente y su psicólogo. MundoPsicologos.com no hace la apología de ningún tratamiento específico, producto comercial o servicio.
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD