¿Cómo debo orientarle? Me dice que está perdiendo el tiempo ya que no es lo que le gusta y que no hay otras opciones. Quiere trabajar ya que la situación económica de la familia está pasando por un momento difícil y quiere entrar a una institución policial del gobierno con lo cual no estoy de acuerdo ya que me da terror que le pase algo.
Sé que es su decisión y no la mía pero tengo miedo que se equivoque y desperdicie su tiempo y se frustre.
Gracias por su ayuda.
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16 FEB 2016
· Esta respuesta le ha sido útil a 4 personas
Hola Josmar,
Por lo que comentas aquí, entiendo que tu hijo está estudiando algo que ahora mismo no le gusta.
Algo interesante podría ser saber porqué ahora no y porqué inició esos estudios y no hizo otra cosa.
Otra cosa que me llama la atención de lo que comentas es que piensa que no hay otras opciones (entiendo además de sus estudios actuales).
Sin embargo, ha encontrado dentro de las "no opciones" entrar en una institución policial del gobierno.
Con esto quiero señalar que si es como comentas, o bien sí sabe que existen otras opciones y no las alcanza a ver ( como reales para él, por ejemplo) o efectivamente esta alternativa que ha tomado no está dentro de sus preferencias pero del saco de las no opciones ha decidido que es la menos mala.
Ayudar a la economía familiar es un gesto muy noble, recordarle que existen más alternativas compatibles con ese objetivo que esa única opción de dejar los estudios y meterse a la institución policial puede ser una buena aproximación.
Comprendo que tengas miedo por él, es normal, es posible que él también tenga miedo.. pero que ese miedo esté en otro lugar diferente del tuyo.
O puede que sea otra emoción distinta, sería muy enriquecedor para ambos y para lo que aquí planteas que a la hora de orientarle, mostrarle alternativas, etc fueras desde el apoyo a sus emociones (conociéndolas, conectando con ellas) más que a las decisiones en sí.
De esta forma decida lo que decida, los dos os sentiréis seguros pase lo que pase después.
Espero haberte ayudado,
Un saludo.
18 FEB 2016
· Esta respuesta le ha sido útil a 1 personas
Hola Josmar.
En primer lugar, aunque estudiemos una carrera que nos guste, los primeros años son bastante aburridos. Así que es muy normal que, en ese tiempo, tengamos ciertas dudas sobre si es lo que en verdad queremos o no. Entonces una buena idea sería que hable con sus profesores para que disipen sus dudas sobre si la idea que tiene él de esa carrera es, en realidad, la que se va a encontrar si la termina.
Por otro lado, puedes plantearle su futuro a corto plazo, medio y largo. Tal vez dejar la carrera y ponerse a trabajar es lo que quiere a corto plazo, ¿es lo que quiere a medio y largo plazo? Tal vez tomar esa decisión le abra algunas puertas en el futuro y le cierre otras.
Sobre todo plantearle esto y que luego, con toda la información, tome la decisión que él crea conveniente.
16 FEB 2016
· Esta respuesta le ha sido útil a 1 personas
Estimado Josmar:
Si a tu hijo no le gusta la carrera que está estudiando, no tiene sentido que continúe estudiándola. Eso sí, lo de que "no hay otras opciones", creo que habría que analizarlo con calma. ¿Cuál es la carrera que estaba estudiando? Estaría bien que tu hijo acudiera a un gabinete psicopedagógico, donde le harían una exploración de su personalidad, de sus intereses y de sus aptitudes, y con todo ello se podría extraer un perfil del cual surgirían, a modo de orientación, una serie de salidas académicas y profesionales. Existe un amplio abanico de oferta formativa en nuestro país: Ciclos formativos de formación profesional reglada, formación profesional para el empleo, grados universitarios, enseñanzas deportivas, enseñanzas de idiomas, enseñanzas artísticas, etc. Estaría bien analizar toda esa oferta para ver si a tu hijo le satisface algo que no pensaba que existía. A veces pensamos que no hay otras opciones porque simplemente desconocemos lo que hay a nuestro alrededor.
Si definitivamente opta por entrar en el cuerpo de policía u otro cuerpo de seguridad, debes respetar su decisión y apoyarle en todo momento. Puedo entender que sientas miedo, pero no hay trabajo que sea seguro al cien por cien. Un profesor puede ser agredido por un alumno o un familiar suyo, un albañil puede tener un accidente si se le cae encima un ladrillo, un piloto puede estrellar su avión si no tiene visibilidad y fallan los controladores aéreos, un químico puede equivocarse y provocar una explosión en el laboratorio, un futbolista puede lesionarse de gravedad, etc. No todos los días ocurren accidentes o muertes dentro de los cuerpos de seguridad, y no siempre en los mismos lugares. Tu hijo deberá aprender a saber afrontar todos los peligros y situaciones, y eso le ayudará a madurar. Y si finalmente se arrepiente y se confunde, pues a aceptarlo y seguir adelante. De los errores se aprende, y ellos nos harán más fuertes y maduros. Si sobreproteges a tu hijo, se hará muy débil y se acobardará ante la más mínima dificultad que se encuentre en su camino. Aún es joven y estoy seguro de que, tarde o temprano, conseguirá trabajar en algo que le agrade.
Reflexiona sobre todo esto y habla tu hijo. Investiga a ver si de verdad no quiere seguir en la carrera porque no le gusta o solamente desea trabajar para ayudaros. Se entiende el gesto, pero no tiene por qué dejar los estudios por esa razón, si acaso ralentizarlos y terminarlos más tarde, pero nunca dejándolos. De todo esto habla con tu hijo, al igual que mis sugerencias.
16 FEB 2016
· Esta respuesta le ha sido útil a 2 personas
Buenos días Josmar,
Entiendo tu preocupación, y es normal como padre que quieras lo mejor para tu hijo, sin embargo las personas aprendemos a base de aciertos y errores y las experiencias que vivimos. Forzar a tu hijo a estudiar si no lo desea puede resultar una pérdida de tiempo y dinero. Al ser mayor de edad intentar apoyarle en sus decisiones siempre y cuando no conlleven un peligro o situación negativa para él o los demás. Parece tener claro lo que quiere de momento, y en caso de que se de cuenta que se ha equivocado siempre podrá rectificar. Al fin y al cabo lo importante es su felicidad. Simplemente puedes comentarle como te sientes y tu preocupación, sin que parezca que le estás regañando o presionando, por ejemplo indicándole como comentas, que tienes miedo de que se equivoque, desperdicie su tiempo y se frustre.
