¿Cómo puedo hablar con mi hijo?

Comprendo que estés preocupada por la situación de tu hijo. Es importante abordar estos problemas de manera delicada y comprensiva. Aquí hay algunas sugerencias sobre cómo puedes ayudar a tu hijo en esta situación:

Comunicación abierta: Habla con tu hijo de manera calmada y respetuosa sobre tus preocupaciones y cómo sus elecciones y comportamientos están afectando su vida y bienestar. Hazle saber que te importa y estás ahí para apoyarlo.

Escucha activa: Permítele a tu hijo expresar sus sentimientos y puntos de vista sin juzgarlo. Trata de entender su perspectiva y las razones detrás de su comportamiento. Esto ayudará a fomentar una comunicación más efectiva y a construir confianza.

Explora sus intereses y metas: Ayuda a tu hijo a reflexionar sobre sus pasiones, intereses y metas en la vida. Pregúntale qué le gustaría lograr a largo plazo y cómo podría dar los primeros pasos hacia esas metas. Esto puede ayudarlo a encontrar motivación y propósito en su vida.

Fomenta la responsabilidad: Anima a tu hijo a asumir responsabilidades y compromisos. Puedes comenzar estableciendo expectativas claras en cuanto a las tareas domésticas o proyectos pequeños que pueda llevar a cabo. Esto le ayudará a desarrollar habilidades básicas y a sentirse más empoderado.

Busca apoyo profesional: Aunque tu hijo se muestre reacio a buscar ayuda profesional, podrías intentar sugerirle que al menos se informe sobre las opciones disponibles. Explícale cómo un psicólogo podría ayudarlo a enfrentar y manejar sus desafíos emocionales y conductuales.

Fomenta la autonomía: Ayuda a tu hijo a desarrollar habilidades de autosuficiencia y autonomía. Anímalo a explorar oportunidades de educación, capacitación o empleo que puedan brindarle nuevas perspectivas y un sentido de propósito.

Establece límites y consecuencias: Si el comportamiento explosivo de tu hijo cruza límites inaceptables, es importante establecer límites claros y comunicar las consecuencias de su comportamiento. Estas consecuencias deben ser proporcionales y aplicarse de manera consistente.

Recuerda que cada situación es única y puede requerir enfoques personalizados. Si consideras que la situación es grave o que tu hijo podría beneficiarse de ayuda profesional, no dudes en buscar el apoyo de un terapeuta, consejero o psicólogo familiar.

Ten en cuenta que el cambio lleva tiempo y que tu hijo debe estar dispuesto a buscar ayuda por sí mismo. Mientras tanto, sigue ofreciéndole tu amor y apoyo incondicional, y asegúrate de cuidar también de tu propio bienestar emocional.

¡Te deseo lo mejor a ti y a tu hijo!
Un abrazo
Begoña
Terapia Online

Madre57 gracias por confiar en los profesionales que formamos esta plataforma de @ MundoPsicologos.
En primer lugar siento esta convivencia que debe ser muy dura para todos los que formáis parte de su entorno. Posiblemente ahora con 25 años ya no puedas decirle lo que debe hacer, ya es un hombre adulto.
Pero realmente has de conseguir hablar con él de forma asertiva, ya que si está toda la noche atento a la pantalla con los videojuegos cuando llega el nuevo día no debe poder ni trabajar ni estudiar.
Debe ser consciente que unos buenos hábitos de vida son esenciales y si no puede conseguirlos él mismo, ha de ser ayudado por un terapeuta.
Te animo a exponerle tu preocupación. Un saludo.

Hola, Madre 57:
supongo que este no es un problema que ha surgido así de pronto. La crianza de los hijos es muy complicada y supone un reto a lo que muchos padres no sabemos enfrentarnos pues los hijos no llevan manual de instrucciones. Veo que la situación es compleja y sobre todo por la edad que tiene, ya es mayor de edad sobradamente por lo que no podéis acudir con él a una consulta que sería lo más apropiado, si él no quiere. Mi consejo es que asistáis los dos padres y vayáis consiguiendo con ayuda de un profesional, herramientas y estrategias para poder lidiar con él y hacerle cambiar algunos aspectos. No os desesperéis, es lógico que estéis agobiados y preocupados, pero se pueden conseguir cosas. Una de las cosas que podéis hacer es intentar hablar con él en un tono relajado, siempre sin ceder a sus malos modos. Dejadle claros algunos puntos y no cedáis. Por favor, tened muchísima paciencia y no entréis en su juego, pero insisto buscar ayuda profesional.
Mucho ánimo. Ana Lucía Guillén Arqueros.

Hola!!!

Lo primero que debemos tener claro es que el no necesita un psicólogo, aunque sí lo necesitará en el futuro muy probablemente. éL no contempla la necesidad en este momento, y es lógico. Tiene cubierta todas las necesidades, ¿por qué iba a necesitar ayuda psicológica? Siento decirles que en estos casos son los padres quienes debéis acudir a terapia para que el profesional os guíe en cómo poder reconducirle y comience a adaptarse a un mundo que será implacable con él en el futuro (ahí es, como digo, cuando él sentirá necesitar ayuda). Siempre digo que papá y mamá leones deben preparar a sus leoncitos a que se preparen para el mundo; eso es la educación y eso es lo que tenemos que tratar con su hijo. Pero, lógicamente no lo ve. El leoncito no saldría a cazar si papá y mamá peones siempre le tuvieran comida en la cueva, pues no tendría por qué... Usted no lo ha dicho pero no me equivoco si le digo que su hijo vive con usted, ¿verdad?

Insisto, acuda usted a terapia y le ayudaremos a conducirlo. Con él no podemos trabajar porque él no considerará nunca la necesidad.

Un saludo, y siento una respuesta tan tajante.

Jose

Hola, buenos días. Entiendo que te sientas desesperada e impotente. Según lo que comentas podría tratarse de un posible trastorno adictivo pero se necesita más información. Os recomiendo que solicitéis cita con especialidad en Adicciones para confirmarlo o descartarlo. Detrás de esto se esconden problemas emocionales. Hay estrategias para hacerle ver que necesita ayuda. Saludos.