Mi problema es el siguiente. Tengo un niño de 10 años en cuarto de primaria, en su colegio que es concertado, les castigan sin recreo cuando existe algún problema.
Tienen delegado y apunta en el encerado si alguien habla, el viernes pasado mi hijo se quedó sin salir a jugar un partido de baloncesto que organizaban los profesores porque este niño le apuntó.
¿Se puede dejar a juicio de otro menor el castigo de un compañero? Si le cae mal alguien, ese alguien está perdido.
Ayer el profesor de música insistió a toda una clase que había mandado prepararse una canción. Ningún niño era consciente de ello, pues hoy castigados sin recreo y sin llevar el bocadillo.
Así en reiteradas ocasiones. Hablé con el director y tutor y en otros años también diciendo que yo no me oponía a un castigo como más deberes, pero no sin ejercicio, mi hijo tiene sobre peso y siempre está con dietas. Por las tardes le llevó tres días por semana a hacer deporte y lo poco que hacen en el cole se lo quitan.
Son cinco horas seguidas de clases y necesitan un respiro. ¿Qué puedo hacer para que no le tengan manía?
Es un niño que saca 9 y 10 en todo.
Muchas gracias de antemano. Voy a tener reunión con el tutor y no quiero meter la pata.
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23 MAR 2015
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No.
Ningún castigo enseña, o educa o modifica conductas; y si las modifica es porque las cubre de miedo, vergüenza, rabia y humillación.
El adulto que castiga es un adulto que no respeta la infancia y no la comprende.
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2 respuestas
24 MAR 2015
· Esta respuesta le ha sido útil a 4 personas
Muchas gracias por las respuestas, esta semana tendré la reunión con la tutora. Ya he tenido esta conversación con ella o con el director estés año y en años anteriores. Les dije lo de dar vueltas corriendo y me dijeron que eso no estaba permitido, y no se lo Decía por castigos a un solo niño si no cuando les castigaban a toda la clase.
También a su tutora pero no sirve de nada. No quiero ser la madre a la que por hablar la tomen con su hijo, pero algo la diré con respeto y educación haber si consigo algo.
Gracias y un saludo
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20 MAR 2015
· Esta respuesta le ha sido útil a 3 personas
Estimada Amanda:
Es importante permitir al profesorado que lleven una política de recompensas y sanciones justa con su grupo para evitar que el alumnado no se tome en serio el trabajo de clase. No obstante, está bien que comentes en una tutoría aquellos aspectos que no te parecen bien. No propongas que no le castiguen, simplemente que piensen en otros castigos.
Personalmente, no estoy en contra de que se quede alguna vez sin recreo, solamente si este castigo vale la pena. Lo que no me parece bien es que les prohíban comerse el bocadillo. Pueden quedarse en el patio del recreo sentados en un rincón, desayunando, y luego siguen sentados sin poder jugar a nada mientras ven a los demás haciéndolo. Eso sí que debes comentárselo al tutor.
Entiendo el caso de tu hijo, tal vez deberías pactar otro tipo de castigos. Si está justificado castigarlo, que realice otro tipo de actividad, desde dar varias vueltas al patio durante el recreo y vigilándolo (hace ejercicio y además puede resultarle poco agradable el estar corriendo solo delante de los demás), o que realice un trabajo extra las tardes en las que no tenga que ir a deportes, además de reparar los daños que haya hecho en clase. Si consideran todos justificado de que hay niños que le tienen manía a tu hijo, pues lo ideal es siempre rotar cada día la persona que tiene que apuntar quién se porta mal, o simplemente no dejarlos solos. Yo he sido maestro de Primaria, y lo que hacía era enviar a un niño a hacer un recado de parte mía para evitar que los niños se quedasen solos y pudiesen armar jaleo que molestase al resto de las clases.
Yo creo que la clave es negociar el tipo de castigo, que sea verdaderamente significativo y a la vez saludable. Lo que te he dicho de las vueltas al patio es un ejemplo en relación a tu demanda de que tu hijo haga ejercicio durante el recreo.
