Aceptar la parte injusta de la vida
Esperar que la vida te trate bien por ser buena persona es como esperar que un toro no te ataque porque seas vegetariano.
Os propongo reflexionar un momento sobre la siguiente frase:
- No implica que haya que ser mala persona.
- No implica que para ir a una corrida de toros debas hacerte vegetariano para que el toro no te ataque.
- Implica aceptar que la vida a veces puede tratarte mal... Hagas lo que hagas.
Sin embargo, esta verdad cuesta mucho asumirla. Nos resistimos a aceptar. Y esa resistencia nos agota y a veces nos hunde en desesperación.
No es difícil, por ejemplo, imaginarse a alguien convencido de que si mantiene una actitud positiva y se esfuerza y persevera, las cosas le saldrán bien, y que sin embargo, tras un par de fracasos consecutivos, ese optimismo que le caracterizaba se convierta en indefensión aprendida.
Indefensión aprendida = Haga lo que haga no servirá de nada (Resignación).
Aceptar = Esto no ha servido de nada.
Cuando no aceptamos los sucesos negativos en nuestra vida, ya sean fracasos, pérdidas o traumas, es porque nos aferramos a las expectativas que teníamos. De tal manera que no dejamos de pensar: "Esto no debería haber pasado". No debería haberse terminado, no debería haberme tocado a mí, no debería haber sido así.
Debería. ¿Quién es el que debe nada a nadie? ¿El Universo, Dios, el Presidente?
Tú te debes Felicidad a ti misma
Pero cuando nos fallamos a nosotros mismos somos los primeros que nos hacemos daño, negando ese Gran Deber que tiene todo ser humano a tratar de ser feliz. Éste es el proceso mental:
Me porto lo suficientemente bien como para que me pasen cosas buenas - Me ha pasado algo malo - No soy bueno - No merezco felicidad.
Una falacia absoluta, porque estamos partiendo de una premisa errónea que es: por ser bueno (me esfuerzo, trabajo, me porto bien, pago mis impuestos, etc.) sólo, única y exclusivamente me deberían pasar cosas buenas.
Pero ya sabemos que la vida no funciona así. En el mundo hay bien y mal, y mientras antes aceptemos la adversidad, más pronto podremos superarla.
Así que deja de dirigir tu foco atencional a la Acción, lo que pasó y no puedes cambiar, y empieza a dirigirlo hacia tu Reacción, lo que vas a hacer aquí y ahora para conducirte hacia la felicidad.
Esa felicidad incompleta, inexacta e inestable, pero posible, muy posible, en un mundo injusto, pero lleno de posibilidades.
Las informaciones publicadas por MundoPsicologos no sustituyen en ningún caso la relación entre el paciente y su psicólogo. MundoPsicologos no hace la apología de ningún tratamiento específico, producto comercial o servicio.
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Llegar a un nuevo país buscando mejores oportunidades, formar un hogar, una familia y solo encontrar desempleo, soledad y la muerte de mi hija... No sé cómo puedo encontrar el lado bueno a todo esto. Creo que más golpes no podré soportar.
Jorge, cuando más oscuro está, es cuando más próximo está el amanecer... y cuando menos te lo esperes vendrán poco a poco las soluciones a tus problemas. Un abrazo
Jorge, ánimo. Sigue luchando, todo tiene solución. Te hablo desde la experiencia de una situación personal. Tengo 28 años y llevo desde los 22 ayudando en casa porque la crisis nos tocó muy duramente. Hoy es cuando el esfuerzo y lucha de la familia por completo, te hablo de familia de casa, no los que van de visita, luchar y ser fuertes, habrá momentos de todo, rabia, locura lloros... muy duro pero de verdad, se consigue... Saca ánimos del subsuelo y optimismo, hay que ver el vaso lleno aunque sea difícil. Llevamos muuuchos años así, desde el comienzo de la crisis, pero no tires la toalla, ¡nunca! Ánimo y un fuerte abrazo, con esfuerzo y atadura de cinturón a niveles asfixiantes, se consigue. Mueve cielo y tierra por tus intereses... Pide trabajo en la calle con un cartel, ¡no te avergüences de nada!
Después de 23 años trabajando en una buena empresa y creyendo que lo tenía todo controlado, ahora me encuentro en el paro y así llevo 7 meses tocando fondo y sin saber para dónde voy a tirar, con familia de 5 miembros y sin salida. A veces he pensado en interrumpir mi vida porque no le veo salida a mis problemas los cuales empeoran por días, me acusan las deudas y yo creyendo que no me iba a tocar a mí, pues me ha tocado y bien tocado. Me considero una persona muy positiva pero llego a veces a un punto que no sé para dónde mirar.