El bullying, también conocido como acoso escolar, se trata del uso de la intimidación hacia una persona. En todos los casos, este acto está destinado a dañar, intimidar o coaccionar a una persona. El bullying suele convertirse en un patrón que puede tomar la forma de agresiones verbales, físicas y/o psicológicas. ¿Cuáles son las consecuencias y qué se puede hacer ante el acoso escolar?
¿Qué es el bullying o acoso escolar?
El bullying o acoso escolar es un tipo de violencia física y/o psicológica que es sometida de manera continuada a un alumno por sus compañeros de escuela, instituto o universidad. Se trata de un tipo de maltrato deliberado y continuado que tiene por objetivo someterlo y asustarlo, bien para conseguir algo a cambio (extorsionarlo) o bien por la necesidad de agredir y someter que tiene el o los agresores.
El hecho que se produzcan episodios de bullying tiene diferentes causas, múltiples y complejas. La familia es uno de los más determinantes, ya que es a través de esta donde se aprenden los primeros modelos de comportamiento. Un menor expuesto a violencia familiar puede aprender que el mundo solo se divide en agresores y agredidos. El estrés en el seno familiar así como situaciones de pobreza son otros factores familiares que contribuyen a que se produzcan posibles casos de bullying.
Obviamente, el entorno escolar es el otro gran foco, ya que el ritmo, la motivación de cada alumno o incluso su grado de timidez ayudará a que tenga más o menos interacción social. De los profesores depende, en buena medida, estar atentos a posibles marginaciones de ciertos alumnos, intentar hacer grupos homogéneos y mostrarse como alguien con quien hablar en caso de malestar. También es necesario formar a los profesores en materias de psicopedagogía y psicología para que tengan herramientas que puedan prevenir la situación o actuar lo antes posible si se da. Hay condiciones que pueden ayudar a mitigar los efectos del acoso escolar como son adultos disponibles y atentos, grupos dinámicos modelos sociales solidarios y positivos.
¿Cómo reconocer y prevenir el acoso escolar?
Una de las partes más complicadas que envuelve al bullying es la detección. Suele ser un acoso invisible para los adultos y que tarda tiempo en detectarse, por eso se ha de estar muy atento a los cambios de los niños que puedan indicar que son víctimas de acoso escolar. Como padres o profesores deberán hacer saltar la alarma si se observa alguna de estas actitudes:
- Cambios en el comportamiento.
- Cambios de humor, tristeza o irritabilidad.
- Trastornos en el sueño: le cuesta más dormir y suele tener pesadillas.
- Cambios en los hábitos alimentarios: comen compulsivamente o les falta el apetito
- Presentan síntomas psicosomáticos. Frecuentemente, tienen dolores de tipo somático como dolor de cabeza o de tripa sin una causa orgánica que lo justifique.
- Presentan señales físicas. Hay que poner especial atención si aparecen con golpes o rasguños y diga que se ha caído.
- Rechazo continuado a ir al colegio.
- Problemas para relacionarse y aislamiento. No quiere ir a las excursiones o visitas culturales, no quiere relacionarse con sus compañeros y quiere ir acompañado a la entrada y a la salida del colegio.
- Cambios en su rendimiento escolar. Puede perder interés por los estudios así como dificultades a la hora de mantener la concentración y la atención.

¿Cuáles son los tipos de bullying?
El bullying es la denominación común del acoso escolar, pero podemos hablar de 6 subtipos de este:
- Bullying físico: Es aquel que contiene agresiones físicas: golpes, bofetones, empujones, caídas, zancadillas, etc. También incluye el robo de pertenencias de la víctima.
- Bullying psicológico: Se trata de agresiones que tienen por objetivo disminuir la autoestima del agredido. Las amenazas, la intimidación, el chantaje o la manipulación son solo algunos ejemplos.
- Bullying sexual: Se produce cuando se realizan referencias malintencionadas a las partes íntimas o comentarios sexuales sobre la víctima. Dentro de esta categoría encontramos el bullying homófobo, que es aquel en el que el acoso hace referencia a la orientación sexual del agredido por motivos de homosexualidad, sea real o no.
- Bullying social: El objetivo de este tipo de acoso escolar es aislar a la víctima del grupo, ignorándolo o excluyéndolo. Puede ser directo (expulsar de un grupo) o indirecto (hacer como si no existiera).
- Bullying verbal: La finalidad de este acoso es discriminar, difundiendo chismes malintencionados, bromas insultantes, motes, burlas, rumores racistas o sexuales.
- Ciberbullying: Se trata de una forma de bullying que cada vez ha tomado más protagonismo en los últimos años. Este acoso se recibe a través de internet, y sobre todo en las redes sociales.
Causas del bullying
El perfil tipo del acosador es el de un niño o niña es bastante variado y heterogéneo. Muchas veces convertirse en el centro de las burlas de los compañeros se produce por azar, aunque hay algunos factores que aumentan estas posibilidades como: sufrir alguna discapacidad, haber padecido acoso anteriormente, padecer algún trastorno del aprendizaje o pertenecer a un grupo minoritario, ya sea de carácter religioso, sexual étnico o cultural. Es más fácil que el acoso se agrave si las víctimas son tímidas o introvertidas o tienen dificultades en la comunicación con padres o profesores.
Por otra parte, el acosador suele responder a un perfil de una persona que es físicamente fuerte, también impulsiva y dominante. Es bastante probable que tenga problemas al relacionarse con otras personas y por eso use el miedo y el temor para mantener a otros niños a su lado. Tienen conductas antisociales y cuentan con una ausencia total de empatía con sus víctimas. Pese a que la víctima es la principal sufridora, que un niño o niña responda a este perfil significa que también debería acudir a terapia para buscar el origen de toda esa frustración y rabia y poder tratarse de una manera adecuada por su propia salud mental y la de sus compañeros.
Cabe destacar que a estos dos perfiles principales se les ha de sumar el de los instigadores (jalean al agresor, proponen ideas, colaboran) y el de los espectadores pasivos (refuerza la actitud del agresor en no reprobar su conducta).

¿Qué es el ciberbullying?
Como hemos visto más arriba, el ciberbullying no es más que el uso de las nuevas tecnologías para seguir acosando a las víctimas. La principal diferencia con el acoso escolar es que, mientras con el primero el alcance se limita al centro educativo o al barrio, en el ciberbullying el alcance es mundial. Se le suma que es posible contribuir al ciberbullying de manera anónima.
Los tipos de ciberbullying suelen ser diversos: mensajes anónimos, creación de páginas web o blogs que ridiculizan a la víctima, suplantación de identidad para conseguir confesiones de la víctima que luego se publicarán, etc. El contenido en sí suele ser muy diverso: vídeos grabados sin que la víctima sea consciente, críticas de la religión que practica, sobre su orientación sexual, sobre su procedencia, sobre su nivel socioeconómico, sobre su apariencia física, etc., montajes fotográficos, etc. El ciberbullying puede ir combinado con otros tipos de acoso como el bullying sexual o el verbal.
Consecuencias del acoso escolar
En todos los casos, el bullying tiene consecuencias para la víctima. Aun así, los efectos del maltrato escolar suelen diferir de una persona a otra debido a la personalidad y al entorno familiar de los niños/as. Principalmente, las personas que reciben bullying suelen experimentar los siguientes efectos:
Consecuencias del acoso escolar a corto plazo
- Aislamiento social
- Sentimientos de vergüenza
- Alteración del sueño
- Cambios en los hábitos alimenticios
- Baja autoestima
- Evitación de la escuela
- Síntomas de ansiedad
- Más tendencia a ponerse enfermo/a
- Síntomas psicosomáticos (dolores de estómago, dolores de cabeza, dolores musculares, otras quejas físicas sin causa médica conocida)
- Bajo rendimiento escolar o peores resultados académicos
- Síntomas de depresión
Consecuencias del acoso escolar a largo plazo
Los niños/as que no reciben una intervención en los casos de bullying o acoso escolar pueden acabar padeciendo los siguientes efectos a largo plazo:
- Depresión crónica
- Riesgo de suicidio
- Trastorno de ansiedad
- Trastorno de estrés postraumático
- Efectos en la salud física
- Autolesiones
- Abuso de sustancias
- Dificultad para relacionarse

¿Cómo ayudar a niño/a que sufre bullying?
Para empezar, es muy importante mantener una actitud de comunicación positiva basada en la validación emocional y abierta con los hijos. Eso hará que se muestren más abiertos a contar cualquier problema aunque, en el caso del bullying, el sentimiento de culpa suele tener un gran peso y estas revelaciones pueden tardar algo más de tiempo en producirse. También hay que mantener un diálogo entre padres y profesores que ayuden a detectar comportamientos en entornos que no ve el otro y que puede dar una radiografía más acertada de lo que puede estar experimentando el niño en sus propias carnes.
¿Quién te puede ayudar?
Los psicólogos son un gran apoyo en las familias que tienen un integrante que sufre bullying. No solo actuará con el alumno, sino que podrá servir al resto de familiares para poder crear lazos de unión y protección y convertirse en su bote salvavidas. Los psicólogos especializados en bullying disponen de una gran cantidad de recursos que emplearán con alumnos y familia, incluso si se da el caso con el centro educativo. Los padres de los alumnos que sufren bullying también pueden compartir su historia con otros padres que han pasado o están pasando por una situación similar para sentirse apoyados.
Las informaciones publicadas por MundoPsicologos no sustituyen en ningún caso la relación entre el paciente y su psicólogo. MundoPsicologos no hace la apología de ningún tratamiento específico, producto comercial o servicio.
Bibliografía
- Hurley, K (2020). Short Term and Long Term Effects of Bullying. Psycom. https://www.psycom.net/effects-of-bullying
- Walton, A (2013). The Psychological Effects Of Bullying Last Well Into Adulthood, Study Finds. Forbes. https://www.forbes.com/sites/alicegwalton/2013/02/21/the-psychological-effects-of-bullying-last-well-into-adulthood-study-finds/?sh=5340879d1592
- Seunagal, G (2021). The Psychology Of Bullying: Understanding What's Behind The Bully. Better Help. https://www.betterhelp.com/advice/bullying/the-psychology-of-bullying-understanding-whats-behind-the-bully/