Mi pareja empezó tratamiento psicológico y me pidió un tiempo
Hola. Mi pareja y yo, ambos de 29 años, llevamos 9 años de relación. Desde hace casi 2 años llevamos viviendo juntos.
Nuestra relación ha sido estable desde el comienzo, con excepción de un período de aproximadamente un mes a finales de 2018, cuando él, después de varias discusiones, me pidió un tiempo porque no sabía si seguía sintiendo lo mismo por mí. Después de varias semanas sin contacto, él aclaró sus sentimientos y volvimos a ser pareja.
Desde que empezamos a convivir nos hemos compaginado muy bien en casa y hemos tenido una convivencia agradable. En una ocasión, durante una relación sexual, mi pareja se detuvo de repente pues no le parecía atractiva la presencia de vello corporal en mi cuerpo. Ese episodio creó en mí cierto miedo al rechazo por su parte y que me cohibiera en las relaciones a partir de entonces. En los últimos meses, esta circunstancia, sumada al estrés por nuestras vidas laborales ha provocado que nuestros encuentros sexuales sean escasos.
A él esta escasez de relaciones le provocaba incomodidad y así me lo hizo saber en varias ocasiones, pero yo, no supe estar a la altura y no presté demasiada atención a sus demandas.
Hace casi 3 semanas, él me pidió hablar conmigo y me confesó que había empezado a acudir a una psicóloga, pues no se encontraba bien. Me pidió además distanciarse de la relación por un tiempo indeterminado. Me sorprendió mucho y me sentí culpable por no haberme dado cuenta de sus problemas. Le ofrecí mi apoyo y le sugerí que realizáramos terapia de pareja para solucionar nuestros problemas. Él se negó a participar en la terapia de pareja, y en su lugar me dijo que quería centrarse en sí mismo, que me quería pero que no estaba en condiciones de mantener una relación. Me comentó que la falta de relaciones sexuales era uno de los motivos de su malestar, que se sentía menos atractivo físicamente y que su psicóloga le había sugerido que tenía principio de depresión. A los tres días de esta conversación se marchó de la casa que compartimos.
Desde entonces he decidido respetar su demanda y no he vuelto a contactar con él. Llevamos por tanto 15 días sin hablar ni vernos. Mi deseo es que él recupere su equilibrio mental. Por otro lado, tampoco quiero perder mi dignidad ni mi amor propio.
Me gustaría que esta situación tuviera solución, y realmente no sé si estoy actuando de manera correcta.
Gracias.