Buenos días. Mi hija de 19 años amenaza de forma continuada con irse de casa. Hace 3 años tuvo un novio que no estudiaba. Aunque no nos gustaba para ella tuvimos que “tragar” y hacer como si nada, pero era evidente que no era una buena compañía. Salía con él a todas horas, su carácter cambio y no hacía más que discutir con nosotros y empezó a fumar. Meses después el novio le decía que lo suyo era quedarse en casa y durante 4 meses no salió prácticamente más de 3 días, pasándose la mayor parte del tiempo en su habitación saliendo para comer y hablando a todas horas por el móvil. En esa época coincidía que el chico estaba fuera de España. En estos dos años rompieron varias veces y volvieron a juntarse pero hace unos meses el chico rompió con ella definitivamente.
En estos dos años su madre siempre le ha dado todo lo que pedía, cuando se dejaba ayudar hemos estado ahí, pero siempre que hemos tenido discusiones amenaza con irse de casa.
Nuestro matrimonio en este tiempo es todo discusiones, porque yo digo que se vaya y ella que no puede dejarla. En unos días tenemos las vacaciones contratadas y lo mismo…ella dice que no viene y que queda sola en casa, yo he dicho que perderemos 1500 euros pero si ella no viene yo tampoco, que si no quiere venir vaya estos 10 días con alguno de sus tíos porque yo sola en casa, no la dejo 10 días y su madre llorando sin tomar una decisión.
En resumen, discusiones a todas horas y yo no aguanto más. Mi mujer es incapaz de tomar una decisión firme y francamente si esto sigue así no pienso pasarme los próximos años en este ambiente. ¿Qué puedo hacer?
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19 JUL 2023
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En primer lugar, tiene que ser muy difícil gestionar todo esto.
Me falta mucha información para poder saber cuáles son los motivos reales que llevan a tu hija a comportarse de esta forma, pero sí te diría que con 19 años y saliendo de la adolescencia hacia la edad adulta, todavía es muy complicado poder gestionar algunas situaciones, como por ejemplo elegir un novio adecuado o gestionar una ruptura. Me parece importante pararos a escucharla, preguntarle qué es lo que necesita de vosotros, que es normal sentir enfado y estar triste cuando una relación termina pero que vosotros estáis ahí para apoyarla en lo que necesite. Intentad negociar con ella las vacaciones, comentarle que para vosotros es importante pasar tiempo con ella, si aún así no accede a ir, intentad negociar el tiempo que pasa sola en casa, por ejemplo, que vaya a dormir a casa de sus tíos todos los días aunque luego pueda estar en casa ella sola, hacer videollamadas cada dos o tres días para veros. Todas las cosas que pactéis entre los tres con las que os sintáis cómodos.
En relación a las discusiones con tu mujer, quizá el viaje os venga bien estar los dos solos y para poder centraros en la pareja sin estar todo el tiempo pendiente de vuestra hija.
7 JUL 2023
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Hola Orfeus lamento escuchar que estás pasando por una situación difícil en tu familia. Aquí hay algunas sugerencias sobre cómo manejar la situación:
1. Comunicación abierta: Intenta establecer una comunicación abierta y sincera con tu hija. Hazle saber cómo te sientes y escucha sus preocupaciones y puntos de vista. Trata de entender sus razones para querer irse de casa y busca un terreno común donde puedan resolver los problemas.
2. Establecer límites claros: Si tu hija decide quedarse en casa, es importante establecer límites claros sobre las expectativas y responsabilidades mutuas. Esto puede incluir acuerdos sobre la contribución en las tareas del hogar, el respeto mutuo y el establecimiento de horarios para el tiempo libre.
3. Fomentar la independencia responsable: Aunque es natural que los padres se preocupen por sus hijos, también es importante fomentar la independencia y la responsabilidad. Esto implica permitirle a tu hija tomar decisiones por sí misma y aprender de las consecuencias, siempre y cuando no ponga en peligro su seguridad y bienestar.
4. Búsqueda de ayuda profesional: Si la situación se vuelve insostenible y las discusiones continúan sin resolverse, considera buscar la ayuda de un mediador familiar o un terapeuta. Un profesional puede ayudarles a todos a comunicarse de manera más efectiva y encontrar soluciones que sean beneficiosas para todos los miembros de la familia.
5. Cuidar de ti mismo: Recuerda que tu bienestar es importante. Si sientes que la situación está afectando negativamente tu salud mental y emocional, considera buscar apoyo para ti mismo. Esto puede ser a través de amigos, familiares o profesionales de la salud mental.
En última instancia, cada familia es única y la solución adecuada puede variar. Estas sugerencias pueden servir como punto de partida, pero es importante adaptarlas a tu situación particular.
7 JUL 2023
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Hola Orfeus73, gracias por confiar y compartir tu experiencia en éste espacio. Siento que estés pasando por una situación tan completa. A los 19 años ya es mayor de edad y en realidad puede irse de casa si ella lo desea, el problema es que es su forma de conseguir lo que quiere y de condicionar vuestras vidas. Está claro es que es el momento de que toméis decisiones, ya que esto afecta a vuestro matrimonio y también a vuestra hija. Con esa edad, no podemos tomar decisiones por ella y tampoco aceptar chantajes, vive en vuestra casa y se deberían cumplir unas normas mínimas. Se necesita mucha más información y detalles para darte una respuesta más acertada, te aconsejo que pidas ayuda profesional, para que puedas actuar y resolver está situación lo antes posible. Piensa que esté problema se ha mantenido durante 19 años, pero se puede resolver. Deseo hacerte orientado, recibe un cordial saludo
7 JUL 2023
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Hola! Gracias por compartir tu caso.
Planteas dos problemas distintos en uno: la actitud de rebeldía de vuestra hija, por un lado, y el choque de opiniones y de enfoque entre tú y tu mujer, por otro.
Sería interesante poder combinar terapia individual con terapia de pareja (y/o incluso familiar, si vuestra hija accediese a ello).
La terapia individual la podría hacer cada miembro de la familia, quizás a vuestra hija no le apetezca... a vosotros os permitiría poder procesar la relación con ella, cortar si fuera necesario el cordón umbilical entre madre e hija...
La terapia de pareja os ayudaría a llegar a más entendimiento y acuerdos factibles para mejorar el clima de convivencia.
Ahora tenéis un viaje por hacer. Es una inversión económica importante, y hay riesgo de perder parte de ella si vuestra hija no va... Me permito opinar desde mi humilde visión de psicóloga que el viaje (y la inversión) más importante que tenéis entre manos es ese viaje hacia vuestro interior, para lograr más unión y armonía familiar. Esto se consigue desenredando nudos y posibles resentimientos, perdonando supuestos errores, etc. Vaya, todo un trabajo emocional que os ayudaría a sentiros más serenos.
Ánimo!
