El alcoholismo o la adicción al alcohol, es una condición en la que una persona tiene un deseo o la necesidad física de consumir alcohol, a pesar de que hacerlo conlleve problemas tanto en el ámbito personal como profesional de su vida. A pesar de que se trata de una droga legalizada, el alcohol tiene consecuencias más allá de los que podemos ver a primera vista. Conoce los efectos, tanto psicológicos como físicos así como todos los síntomas del alcoholismo.
¿Qué es la adicción al alcohol o el alcoholismo?
La adicción al alcohol o alcoholismo procede de su consumo sostenido y es el causante de diversas enfermedades físicas y mentales. Una persona alcohólica, es decir, que sufre de alcoholismo y de problemas con el alcohol, no sabe cuándo ni cómo dejar su consumo. De hecho, suelen pensar en el alcohol y no pueden controlar cuánto consumen, incluso si esto les conlleva consecuencias tanto a nivel personal como profesional.
En muchos casos, el consumo moderado del alcohol puede, aparentemente, no causar daños a nivel psicológico o físico, sin embargo, la dependencia al alcohol puede pasar desapercibida debido a que se trata de una bebida socialmente aceptada.
Las estadísticas indican que más del 50 % de los españoles suelen beber alcohol de manera frecuente; el 10 %, diariamente, como señala el Observatorio Español de las Drogas y las Toxicomanías. De ese 10 %, el 15 % son hombres de entre 45 y 64 años, según el mismo informe. De hecho, es la segunda droga después de la adicción al tabaco y genera episodios que afectan a la vida social, familiar y laboral de la persona con dependencia.
¿Cuáles son los síntomas del alcoholismo?
Posiblemente, uno de los síntomas del alcoholismo más evidente es la ansiedad que presenta el paciente por beber. Esa necesidad, convertida en dependencia, es la prueba más clara de que hay un problema de dependencia detrás. Para él, es imposible dejar de beber, pues la bebida le aporta el sosiego que apaga esa ansiedad. La tolerancia al alcohol y abandonar el ocio o las relaciones sociales para beber pueden considerarse, asimismo, síntomas claros de dependencia. Además de estos síntomas de la dependencia al alcohol, las personas también presentan lo siguiente:
- Impotencia: Cuando una persona presenta problemas con el alcohol suele sentirse incapaz para controlar el consumo de esta bebida.
- Pérdida de interés: El alcoholismo tiene consecuencias en la vida social de aquellos que lo sufren debido a que la persona suele tener una falta de interés por aquellas actividades que no involucran el alcohol.
- No poder disminuir el consumo de alcohol: Las personas que sufren de una adicción al alcohol o alcoholismo suelen verse incapacitados para disminuir su consumo.
- Dedicar mucho tiempo y recursos al alcohol: Otro de los signos que pueden indicar una dependencia al alcohol es dedicar mucho tiempo a ello, así como gastar mucho dinero en actividades que involucran la presencia de esta bebida.
- Desarrollar tolerancia al alcohol: Un alcohólico o alcohólica suele requerir de más alcohol para poder experimentar los efectos de su consumo, aprendiendo a gestionar sus efectos, aparentando estar bien cuando no es así.
- Síntomas de abstinencia alcohólica: Cuando la persona alcohólica no bebe experimenta síntomas de abstinencia como pueden ser antojos, sudoración excesiva, temblores y hasta náuseas.
- Problemas sociales y profesionales: Las personas que sufren de alcoholismo suelen experimentar problemáticas tanto a nivel laboral como profesional debido a beber alcohol.
- Beber para sentirse mejor: Aquellos que experimentan problemáticas debido a un consumo de alcohol elevado suelen acudir a la bebida para sentirse mejor con su estado de ánimo.
Estos son algunos de los principales síntomas del alcoholismo. Si crees que puedes padecerlos o alguien de tu alrededor puede experimentar de esta dependencia al alcohol, es importante acudir a un psicólogo/a especialista para recibir un tratamiento.
¿Cuáles son los tipos de adicciones al alcohol?
Le debemos al fisiólogo Elvin Morton Jellinek la clasificación de la adicción al alcohol o alcoholismo en cinco tipos. Aunque dicha clasificación tiene ya muchos años, pues es de principios de la década de los años 50 del siglo XX, ha sido muy influyente y, a día de hoy, continúa estando vigente. Como decimos, según Elvin Morton Jellinek hay cinco clases de adictos al alcohol:
- Bebedores Alfa: son aquellos que suelen beber alcohol para paliar otros problemas, sobre todo, emocionales (depresión, ansiedad…). No sufren síndrome de abstinencia, pues su dependencia es puramente mental.
- Adictos Beta: son las personas que consumen alcohol, aunque no frecuente, a causa de sus relaciones laborales o sociales. Son los llamados bebedores sociales. Tampoco suelen presentar síndrome de abstinencia alcohólica.
- Alcohólicos Gamma: son los bebedores más arquetípicos, aquellos que beben y pierden el control de lo que hacen cuando están ebrios. Presentan síndrome de abstinencia.
- Bebedores Delta: junto a los Gamma, los Delta son los más comunes. Son consumidores frecuentes de alcohol que, a diferencia de los anteriores, sí son conscientes de sus actos cuando están ebrios. También son alcohólicos sociales. Sufren síndrome de abstinencia alcohólica.
- Adictos Epsilon o Dipsomanía: son los bebedores compulsivos, aquellos que ingieren gran cantidad de alcohol durante un período limitado de tiempo, período que alterna con épocas de abstinencia.
Causas del alcoholismo o de la adicción al alcohol
Las principales causas del alcoholismo son las siguientes:
- Consumo excesivo: La primera causa de la adicción al alcohol es beber demasiado. Aquellas personas que beben diariamente o de manera frecuente y durante un período continuado en el tiempo son más susceptibles de padecer dependencia. A ello se suma la edad: cuanto antes se empiece, más riesgo habrá de ser adicto.
- Ambiente familiar: Hay otra serie de factores que igualmente inciden en la dependencia del alcohol. Uno de ellos es el que atañe al ambiente familiar. Los investigadores afirman que crecer en un hogar donde uno de los progenitores es adicto al alcohol puede provocar que los descendientes se conviertan en alcohólicos.
- Factores económicos y sociales: Aquellos que tienen una economía más holgada presentan mayor riesgo de consumir alcohol de manera frecuente, lo que puede degenerar en dependencia. Y lo mismo sucede con las causas sociales, propias de la adolescencia, donde la adicción al alcohol parece ser la consecuencia de los deseos de los jóvenes por superar la timidez y sentirse integrados en el grupo.
- Problemas psicológicos: Por último, no debemos olvidar que detrás de la dependencia del alcohol muchas veces se encuentran problemas emocionales, como la depresión o la ansiedad, por ejemplo.
Alcoholismo y sus consecuencias
Como ya hemos adelantado, las consecuencias de la adicción al alcohol son tanto físicas como emocionales. Los profesionales en esta dependencia apuntan que el alcoholismo es el causante de más de sesenta enfermedades, además de problemas laborales, familiares, sociales o de pareja. Las principales consecuencias de esta compleja adicción son:
- Hígado: incremento de grasa, inflamación, cirrosis.
- Estómago: gastritis y úlceras
- Páncreas: inflamación
- Esófago: úlceras
- Corazón: hipertensión, insuficiencia cardíaca, infarto, arritmia…
- Sangre: hipoglucemia
- Sexualidad: disfunción eréctil, ausencia de menstruación
- Huesos: disminución de la masa ósea, daños en la médula
- Embarazo: aborto espontáneo, síndrome de abstinencia en el feto
- Cáncer: estómago, intestino, colon, páncreas, mama, hígado…
- Neumonía
- Problemas oculares
- Depresión
- Deseos suicidas
- Ansiedad
- Demencia
Efectos del alcohol a corto plazo
- Dificultad para concentrarse
- Inhibiciones reducidas
- Problemas de memoria
- Visión, coordinación y reflejos afectados
Efectos del alcohol a largo plazo (psicológicos)
- Aumento de la depresión y la ansiedad
- Desarrollo de tolerancia y aumento de su consumo
- Dependencia al alcohol
- Deterioro de la capacidad de aprendizaje y memoria
- Desarrollo cerebral interrumpido
¿Puede verse afectado el comportamiento de un alcohólico/a con su pareja?
Las personas que sufren de alcoholismo pueden ver afectadas todas sus relaciones, tanto familiares como amorosas. Sobre todo la pareja puede ver más agresividad e irritabilidad en las personas que tienen esta dependencia al alcohol debido al síndrome de abstinencia alcohólica.
¿Cómo ayudar a una persona que sufre alcoholismo?
Como con cualquier enfermedad física o emocional, el entorno familiar es vital para la recuperación de la persona que presenta adicción al alcohol. No se trata solo de ayudar al paciente, sino de acompañarlo durante todo el proceso para otorgarle seguridad y confianza, así como afianzar las posibilidades de rehabilitación. Los familiares no deben culpabilizar al adicto y tienen que tratar de evitar aquello que le induce a beber. La ayuda profesional es necesaria para poder abandonar la adicción.
¿Qué es la abstinencia al alcohol?
El síndrome de abstinencia al alcohol implica padecer síntomas que ocurren cuando un alcohólico o alcohólica dejan de consumir alcohol o reducen significativamente su consumo. Las personas con abstinencia al alcohol experimentan una serie de síntomas físicos y psicológicos, que pueden ir desde la ansiedad leve hasta la fatiga o las náuseas.
Síntomas de abstinencia al alcohol
Los signos y síntomas del síndrome de abstinencia al alcohol pueden aparecer desde seis horas hasta pocos días después del último consumo. Por lo general, incluyen al menos dos de los siguientes:
- Temblores
- Ansiedad
- Náuseas
- Vómitos
- Dolor de cabeza
- Aumento de la frecuencia cardíaca
- Irritabilidad
- Insomnio
- Pesadillas
- Alta presión sanguínea
Estos síntomas al dejar de beber alcohol pueden empeorar durante los dos a tres días siguientes, además algunos síntomas leves pueden persistir durante semanas en algunos casos. Por ello, dejar el alcohol puede ser muy difícil debido al síndrome de abstinencia. Si crees que estás padeciendo de abstinencia al alcohol, es importante acudir cuanto antes a un psicólogo/a profesional.
¿Quién te puede ayudar si tienes problemas con el alcohol?
Los profesionales especializados en salud mental son los expertos que pueden ayudar a las personas dependientes al alcohol a superar su adicción y rehabilitarse. Por eso, si crees que tienes problemas con la bebida o conoces a alguien cercano, contacta con un psicólogo o psiquiatra con amplia experiencia en adicciones. Este profesional evaluará a la persona y le propondrá el mejor modo de afrontar su problema, el síndrome de abstinencia y la deshabituación.
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Escrito por
Dr. Jaume Guinot
Su trabajo como psicólogo incluye también el trabajo de sexólogo y de hipnoterapeuta. Entre otros temas, se ha ido especializando en temas de adolescentes, parejas y adicciones. En los temas de sexología trabaja las dificultades o disfunciones sexuales. Dentro de la hipnosis actúa sobre la adicción al tabaco o adelgazar, pero también control de impulsos y ansiedad.
Bibliografía
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- Legg, T (2018). Alcoholism. Healthline. https://www.healthline.com/health/alcoholism/basics
- Alcohol Use Disorder (AUD). Medline Plus. https://medlineplus.gov/alcoholusedisorderaud.html
