Mi pareja me ha dejado, vivimos juntos y no se qué hacer.

Hace dos meses mi pareja me dijo que quería dejar la relación. Me dijo que no veía las cosas claras, que es hora de ir tomando decisiones de futuro y no siente que quiera tomarlas.
También me dijo que ya no me quiere, aunque se sigue sintiendo muy atraído por mi.
Los dos vivimos juntos en un país extranjero, por lo que el apoyo familiar no está a mano. Debo decir que es 4 años más joven que yo, y que siento que en parte se trata de inmadurez. Creo que quiere seguir viviendo sin responsabilidades ni ataduras, poder viajar con sus amigos sin consultarlo con nadie...(cuando jamás le he puesto pegas para hacerlo). De hecho, él me dijo que en cuanto empieza a salir con alguien siente que pierde su libertad, a pesar de que es consciente de que yo no se la he quitado.
He pasado por todo tipo de fases desde ese momento. Llanto inconsolable, rabia, enfado, distanciarme yo, acercarme más... El problema de todo esto es que quien me está consolando es él, porque es la persona que está conmigo cuando me rompo.
Soy consciente de que mi llanto solo le aleja más de mi, no lo soporta. Cuando me ve bien y con fuerza es cuando más se acerca a mi.
Ahora se va a su país 3 semanas a pasar las fiestas y me deja aquí sola. No es capaz de asegurarme si va a volver a casa o irá a otro lugar. Desde que me dejó, ha estado buscando piso pero cuando iba a pagar el único que encontró, me preguntó si debía hacerlo y yo le dije que por mi no. No se fue. Después de eso sigue buscando para "tener un plan B" a la vuelta.
Estoy bloqueada. No quiero que esto termine, no quiero asumir que tengo que empezar mi vida en el extranjero de nuevo y sola.
Por una parte siento que, si me ha pedido tiempo y espacio, debo dárselo y esperar. Por otra, siento que no va a volver y que estoy perdiendo mi tiempo manteniendo una casa a la que él pueda volver.
Debo añadir que en ocasiones está muy frío y distante, y en otras viene y de la nada me da un beso o abrazo. Él en general no es muy cariñoso por lo que verle hacer eso me descoloca aún más. Quizás solo sienta pena por mi. Sé que debería poner límites pero, es que no quiero. Siento que si los pongo voy a perder el poco tiempo que nos quede juntos...