Tengo 26 años, recién terminé mi universidad, pero tengo una frustración de que no he conseguido trabajo y sigo dependiendo de mis padres, lo cual me incomoda en su totalidad. Me frustro demasiado que me dan crisis, porque me gusta la carrera que escogí pero no me apasiona. No sé quién soy, desempleada, queriendo asentar la cabeza ( con una familia y un trabajo estable). Pero nada de eso se puede...
Respuesta enviada
En breve comprobaremos tu respuesta para publicarla posteriormente
Ha habido un error
Por favor, inténtalo de nuevo más tarde.
psyd_user_launch_banner_ttl
psyd_user_launch_banner_txt
Mejor respuesta
22 FEB 2022
· Esta respuesta le ha sido útil a 0 personas
¡Hola Kate!
Ese sentimiento es totalmente normal, es un cambio de etapa, has pasado de hacer todo "en el orden que toca" y ahora te plantas al final del camino con la gran pregunta; ¿ahora qué? De repente no hay nada que nos marque el camino.
Tienes que pasar el duelo de tu vida anterior, de tu yo adolescente.
No te presiones y preguntante; ¿Qué cosas puedo empezar a hacer que estén en mi mano? Márcate pequeños objetivos a corto-medio plazo y felicítate cuando los vayas consiguiendo (seguro que no eres tan amable contigo cuando los consigues como de dura puedes llegar a ser cuando no lo haces).
Date tiempo y hazte preguntas, todo llega.
¡Un abrazo!
22 FEB 2022
· Esta respuesta le ha sido útil a 0 personas
Hola Kate,
Antes que nada, te agradezco que hayas explicado como te sientes en este espacio.
Entiendo que debes estar pasando por un momento realmente duro, el no poder cumplir nuestras metas y no saber qué camino tomar nos puede generar frustración, ansiedad y confusión. Primero de todo, es importante que sepas que lo que estas sintiendo es totalmente normal y que muchas otras personas se encuentran en una situación similar. En este punto deberíamos revisar las expectativas que tenemos sobre nuestro futuro y los conceptos de autoexigencia y perfeccionismo. Esto es importante porque por un lado, la sociedad nos "impone" un camino y unas metas a conseguir (ir a la escuela, a la universidad, trabajo, casarnos e hijos), pero debemos ser realistas y comprender que en la época en la que vivimos no es tan fácil conseguir todo esto. Además, pueden haber factores de personalidad como la exigencia y el perfeccionismo que ayudan a que esa insatisfacción que sentimos sea mayor y que acabemos sintiendo culpa y vergüenza por nuestra situación.
En este caso se debería hacer una reestructuración de creencias y supuestos que están afectando tu día a día y encontrar metas a corto plazo más realistas y objetivos vitales que nos motiven. Además, sería importante aprender herramientas para gestionar todos los sentimientos y emociones que estás sintiendo y reforzar tu autoconcepto (¿quién eres? ¿cómo te defines?) y tu autoestima.
Te animo a acudir a un profesional para que te acompañe en este camino.