¿Es bueno ser mala persona?

Hola Julian,
Acorde a los compañeros/as, puedo añadir que uno sólo es responsable de sí mismo, no de los demás. No podemos elegir lo que la vida nos ofrece, pero si cómo interaccionamos con lo que nos rodea. Todo lo que podemos dar es sólo aquello que tenemos, si uno sufre, ofrece dolor; si uno sonríe a pesar de los pesares, regala amor. Tal vez no podamos cambiar el mundo entero, pero si ser el ejemplo que queremos ver en él. Uno de los ingredientes de la felicidad es la paz interior, y el camino hacia ella empieza siendo fiel a los propios valores, aceptar lo que no se puede controlar y ocuparse de lo que sí se puede cambiar.
Y recuerda, que el mal hace mucho más ruido que el bien, éste trabaja en silencio. Existen grandes pequeños gestos de bondad y solidaridad cada día, aunque no se vean ni se escuchen con tanta frecuencia.
Sembrar el bien puede ayudar a otros a recoger el fruto, y tal vez, cambiar algo en su interior y modificarlo a algo mejor.
Generalmente, lo que se ve, sólo es la superficie, apariencia. Si llegamos a la profundidad, tal vez la persona que aparentemente sufre tenga buenos cimientos y fuerte pilares de afrontamiento; tal vez la persona que aparenta felicidad, por dentro esté vacía y sin pintar.
Lo importante sería preguntarse: ¿cuántos colores puedo yo ofrecer al mundo? ¿ofrezco lo que quiero o sólo lo que puedo?

Julian creo que nadie consigue nada siendo mala persona. Lo que tú debes hacer es trabajar tú autoestima y tú asertividad, verás cómo no es necesario ser " malo" para triunfar. Te animo a que leas sobre ello o bien que pidas ayuda para aprender a decir "NO" y a quererte y respetarte sin necesidad de convertirte en alguien que probablemente no quieras ser. Saludos cordiales

Hola Julian,
Siendo sincera, no se en que te basas para saber que una persona "mala" es más feliz, puede que esa persona trate de buscar su felicidad y por el camino vaya errando hasta alcanzarla, quizás no tenga las herramientas necesarias. En esta sociedad vivimos tan obsesionados con "ser alguien" que en determinados momentos somos capaces de encontrar la felicidad en el mal de otros. Pero esa felicidad no es verdadera, puesto que una persona que busca el mal ajeno constantemente, a mi entender, tiene una vida bastante vacía.
No olvides que el objetivo de cualquier ser humano es encontrar la felicidad.
Te aconsejo que trates de buscar la tuya, puesto que la felicidad se encuentra en las pequeñas cosas, en los pequeños actos.
Si te han hecho daño, trata de poner a esa/s persona/s fuera de tu vida, hay mucha gente interesante, como para dedicar tiempo a quien no se lo merece.
Muchas suerte en tu busca de la felicidad.
Irene (Hedoné Centro Terapéutico)

Hola Julian:

Al igual que mis compañeros, pienso que en función de lo que pienses y hagas, así te vas asentir y la clave está en cómo se siete uno. Solamente los psicópatas no se sienten mal, ni responsables, ni les duele, cuando matan o hacen daño a alguien.

Puedes analizar como te sientes haciendo sonreír a un anciano triste, o pensando en como hacer las cosas con excelencia, da igual donde trabajes.
Después contrasta, si te lo puedes permitir, poniendo triste a un anciano o haciendo el vago y molestando a tus compañeros o clientes en el trabajo.
Recibe un cordial saludo.

Hola Julian, pese a toda la fascinación que pueda sentir las personas por ellos, los 'malos' como los llamas tú, no son la normalidad. No tener empatía por el sufrimiento ajeno es un criterio sólido de personas anti-sociales, de trastornos graves y incluso de psicopatía. Son personas que se saltan los límites. A nivel salud y judicial, no es lo más recomendable, sin obviamente hablar de moral que es otra historia. Espero haberte aclarado algo. Dra. Roustan. Barcelona.

Estimado Julián:

Dependerá un poco de tu conciencia y de tu escala de valores. Habría que analizar bien por qué esas personas se comportaban así, y saber si la gente les ayudaba a reflexionar o le hacían pagar con su propia medicina. Tú piensa lo siguiente: ¿Cómo te sentirías si le quitaras un caramelo a un niño? ¿O si le levantaras la falda a una chica delante de todo el mundo? ¿Y si robaras en una tienda de ultramarinos? ¿Y si robaras a una señora mayor su bolso, dándole un tirón y arrojándola al suelo, rompiéndole la cadera? ¿Y si robaras dinero de las arcas del Estado?

Bien, valora estas cuestiones y piensa cómo te sentirías. Piensa en las ventajas e inconvenientes, y en las consecuencias sobre ti mismo y sobre los demás con todas tus acciones malévolas. Valora si te sientes bien al saber cómo se sentirían esas personas, cómo sufrirían. Valora si es justo o no. Entonces, ¿crees que serías feliz teniendo esa carga en la conciencia? ¿serás feliz siendo honesto y ético, y ayudando a los demás, aunque haya otros que sean malos? ¿crees que serías feliz denunciando a las personas que hagan cosas malas y tengan su merecido, al tú sentir que has hecho una buena obra? ¿te sentirías mejor denunciando a los malos, o siendo como ellos?

Reflexiona sobre todo esto y valora entonces si es bueno ser mala persona. Lo importante es cómo tú te sientes.

Un cordial saludo.

Me parece excelente, muy buena y muy profunda su pregunta, Julián. Pero quizá radique el problema en que la disyuntiva bondad -maldad, entra más dentro de la ética, y ésta dentro de la filosofía..., vamos, que es problema más filosófico y ético que psicológico se su estricto.

No obstante un trastorno de la personalidad del que se ha investigado mucho pero del que se habla muy poco, la psicopatía, tiene mucho que ver con esas reglas morales de las que le hablo, ya que son " los malos por excelencia", si me permite Ud el sarcasmo.
En mi modesta opinión , y aun estando muy formada en este trastorno de personalidad del que le hablo, creo que malos va a haber siempre y siempre los hubo, porque como sabe Ud , tanto la enfermedad mental, como los " amorales" o " in-morales" son consustanciales a la misma variabilidad genética y de comportamiento humano , desde que el mundo es mundo. Pero creo que, realmente es más debate para filósofos. No obstante , le aplaudo el gesto de poner aquí tan aguda y profunda reflexión para que otros compañeros opinen sobre tal disyuntiva.
Ya sabe donde encontrarnos para cualquier duda o consulta y espero que pronto encuentre la solución a ese enigma de la moral .