¿Está mal que solo hable de mis problemas?

Buenas tardes Karla, quiero expresarte mi agradecimiento a la confianza que nos depositas para expresar lo que te ocurre.
Decirte que los seres queridos suelen estar a nuestro lado tanto cuando las cosas van bien como cuando van mal. Por tanto entiendo que han de poder ser un punto de escucha y apoyo cuando tienes una dificultad o problema. Otra cosa será que lleves mucho tiempo con dificultades o encallada en ellas. Llega un momento en que los seres queridos, nuestro entorno, igual ya no saben qué decirnos y cómo ayudarnos, y nosotras fácilmente podemos caer en la sensación de que nadie nos escucha, no nos comprenden, somos una carga, o pensar que piensan mal de nosotras o nos etiquetan de victimistas.
Yo te diría que si llevas tiempo sintiéndote mal, pases de preocuparte a ocuparte. En caso de que sientas que esta situación te supera, te animo a que des el siguiente paso: pedir cita con una profesional de la psicología para que pueda acompañarte en lo que estás viviendo.
Aquí estamos para ayudarte! En Mundopsicologos vas a encontrar profesionales que trabajamos presencial o online y también a profesionales que ofrecen una primera sesión gratuita.
Te animo a que des un nuevo paso para sentirte mejor!
Un abrazo, María José Guarino.

Hola Karla,
Al leerte lo que más me ha llamado la atención es que tú sientes que te haces la víctima. Cuando nos ponemos en rol de víctima cedemos el poder a los otros para que resuelvan nuestros problemas. Al ser un rol, es decir comportamientos que adoptamos en determinadas situaciones, se puede cambiar siempre que el cambio nos traiga algún beneficio mayor que mantener ese rol.
Para iniciar esta indagación hacia ti misma puedes preguntarte ¿que necesito del otro cuando siento que me pongo en rol de victima? ¿Podría cubrir esa necesidad de atención, escucha, amor... de otra forma?. El trabajo con un/a psicóloga te puede ayudar a aprender estrategias para detectar lo que necesitas y saber qué hacer y cómo pedir al otro conectándote con tu parte de poder y responsabilidad en vez de con la parte de víctima.
Espero que te sea de utilidad. Has sido muy valiente al exponer tu situación, es el primer paso para el cambio.
Un saludo!

Hola Karla!!!
Compartir nuestros problemas con la gente que queremos está muy bien pero el amor es un equilibrio entre dar y recibir, por tanto, también debes escuchar sus pesares, sus anécdotas...sus cosas.
Por un lado te animaría a preguntarles si les molesta tu comportamiento.....quizás no les moleste...la manera de saberlo es preguntarlo.
Y, por otro lado, te animo a que hables con un psicólogo y le cuentes estas dudas que tienes: si te presentas al mundo como una víctima, si no, etc.
Un abrazo!!!

Hola Karla,
A veces nuestros problemas nos preocupan de tal manera que invaden nuestra mente y es difícil dejar de pensar en ello, y eso afecta a nuestras conversaciones y a las relaciones con los demás. Es como si la mente tuviera esa emergencia que quiere resolver y todo lo demás pasa a segundo plano. Cuando esto pasa es conveniente saber quien de nuestro entorno puede brindarnos apoyo y con quien abrirte, porque nuestros amigos y familiares, con buenas intenciones nos pueden dar consejos desacertados o hacer que nos sintamos incomprendidos. Buscar desahogarte con un profesional de la salud mental puede ayudarte mas en la contención y también ayudarte a mejorar tus habilidades sociales. Cómo dices hablar “solo” de tus problemas con tus seres queridos dificulta la relación, ya que, toda relación sana es recíproca, seria bueno interesarte por ellos y preguntarles sobre su vida y que ellos hagan lo mismo contigo.
Espero haberte ayudado! Saluditos!

Muy buenas Karla, quizá te esté pasando esto porque tienes muy presentes esos problemas sin resolver y esto te impide tener un pensamiento más positivo. Y me imagino que será algo muy desagradable para ti en primer lugar. Te animo por tanto a que trabajes en terapia ese manejo de pensamientos y la resolución de problemas, para poder vivir un poco más tranquila y feliz contigo misma y tus pensamientos.
Además, seguro que tus seres queridos también se alegrarán muchísimo de verte más contenta.
Un fuerte abrazo,
Olaya Turbón.