Los 4 'tipos' de bulimia y sus diferentes fases

La bulimia se trata de un trastorno psicológico de la alimentación en la que las personas sufren de episodios de altas ingestas (donde se consume una gran cantidad de comida de una sola vez). Durante estas ingestas más o menos exageradas, son muchas las personas que pierden el control sobre su alimentación. Para compensar este descontrol, los que padecen de este trastorno intentaran perder peso a través de formas inapropiadas como los vómitos, el uso de laxantes, entre otros.

Pero, aunque esta es la parte más conocida de la bulimia, la realidad es que existen fases dentro de este trastorno y diferentes tipos (ya no reconocidos de manera separada en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales) que nos ayudará a identificar mejor este trastorno.

¿Cuáles son las fases de la bulimia?

Las personas que padecen de este trastorno de la alimentación acaban pasando por una serie de fases o ciclos que están entre los atracones y las purgas. Estos dos ciclos también están acompañados por una serie de comportamientos, pensamientos y emociones. De este modo, podríamos hablar de que las personas con bulimia suelen pasar por un ciclo entre realizar una dieta, los atracones de comida y la repetición de estas fases.

Por lo general, las personas que padecen de bulimia, aunque pueden ser conscientes de estos ciclos, sienten que les es imposible parar. Aun así, comprender en qué se basan estas fases puede ayudar a descubrir cómo detener estos ciclos y empezar un camino hacia la recuperación:

• Episodio de alta ingesta: Durante esta fase las personas que padecen de bulimia suelen tener una alta ingesta, es decir, comer de manera compulsiva y sin un control de ello. De esta forma, estos episodios implican comer mucha más cantidad de comida que en la normalidad.
• Episodio de purga: La purga se convierte en muchos casos en una manera de liberarse de los sentimientos negativos, ya sean físicos como emocionales, que sienten debido al atracón. Estas purgas se realizan a través de vómitos autoinducidos, así como el uso de laxantes o diuréticos. Además, algunas personas usan otros comportamientos, como la realización de mucho ejercicio, para intentar compensar las calorías adicionales consumidas.
• Período de calma antes de reiniciar el ciclo: Después de un episodio de atracones y purgas, las personas que padecen de bulimia pueden experimentar un período de calma. En este punto, la persona puede decidir intentar no volver a darse atracones o purgarse nunca más. Aun así, debido a su mala percepción personal, suelen decidir empezar a restringir la ingesta de alimentos para perder peso, un comportamiento que tiende a conducir a las altas ingestas de nuevo.

Tipos de bulimia

Además de las fases de la bulimia, para entender este trastorno, debemos comprender que antes el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales también establecía diferentes categorías dentro de esta patología. De este modo, en la edición anterior de este manual se enumeraba de manera separada la bulimia purgativa y la bulimia sin purga. Con la nueva edición del DSM-V se incorporaron estas dos dentro del diagnóstico de la bulimia, debido a que se reconoce que las personas que padecen de este trastorno suelen participar en una gran variedad de conductas diferentes. Además, algunos psicólogos también diferencian la bulimia asociada a la obesidad o no asociada a ella. Estas categorías pueden ayudarnos a entender mejor qué supone este trastorno:

1. Bulimia purgativa o purgante: Este era uno de los tipos de bulimia más comunes. Su característica principal es que esta bulimia viene acompañada por una fase de purgación. Durante esta fase, las personas intentan a través de conductas de compensación eliminar las calorías que han consumido durante el episodio de atracones. Estas conductas pueden ser vómitos o el uso de diuréticos o laxantes. Ambos comportamientos son una manera desesperada de intentar revertir el atracón de comida y los sentimientos de culpabilidad y malestar que suelen estar asociados a ello.
2. Bulimia no purgativa: En este caso, la persona con bulimia sin purga no realiza una conducta compensatoria para tratar de eliminar los efectos del atracón. Es decir, en lugar de recurrir a los vómitos, diuréticos o laxantes como un remedio a la ingesta masiva de alimentos, las personas recurren a realizar ejercicio físico de manera excesiva para intentar eliminar las calorías ingeridas o se utilizan medidas de ayuno durante largos períodos.
3. Bulimia asociada a la obesidad: Este es uno de los tipos de bulimia que se da en las personas con un grado de obesidad. Por lo tanto, se trata de una persona con sobrepeso que no se siente a gusto con su físico y que intenta bajar de peso a través de conductas bulímicas.
4. Bulimia asociada al peso variable: Estos tipos de bulimia se dan en las personas con cierto grado de obesidad y que padecen de cambios de peso exagerados debido a las conductas compensatorias asociadas a la bulimia. Esto acaba generando la creencia en las personas bulímicas de que podrán perder el peso que desean a través de estos comportamientos.

Estos tipos de bulimia son tan solo una manera de comprender mejor este trastorno. En realidad, la bulimia puede darse por muchas causas y con diferentes comportamientos. Por lo tanto, si crees que alguien está en esta situación, es importante recomendarle la ayuda de un profesional de la salud mental o incluso de asistencia sanitaria médica si el caso es grave o hay riesgo para la vida de la persona.

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