5 Señales de adicción a las redes sociales: ¿Cuándo es un problema?

¿Son las redes sociales la ‘droga’ de las nuevas generaciones? La adicción a las redes sociales cada vez está más presente tanto en jóvenes como en personas más adultas. La razón de ello es que los ‘me gusta’ o ‘likes’ que obtenemos en las redes afectan a nuestro cerebro de manera muy similar a cuando tomamos ciertas sustancias o realizamos una actividad placentera. Pero, ¿Cómo el uso de las redes sociales se vuelve una adicción?

¿Qué es la adicción a las redes sociales?

La popularidad del uso de las redes sociales aumenta a cada año que pasa. Estas plataformas influencian sobre todo a los niños, adolescentes y cada vez más a los jóvenes y adultos. Pero, de la misma forma que pasa con otras adicciones, las redes sociales pueden llegar a influir nuestro cerebro de una manera dañina. Esto sucede cuando existe una adicción a las redes sociales, es decir, cuando estas se usan de una manera compulsiva y excesiva.

¿Por qué las redes sociales son tan adictivas? 

El uso de las redes sociales tiene un efecto muy significativo en nuestro cerebro. Esto es debido a que al entrar en estas plataformas, los niveles de dopamina, también conocida como la hormona o neurotransmisor del placer, de nuestro cerebro aumentan.

Al obtener un placer inmediato a través de las redes sociales, ya sea mediante a ‘likes’ y otras interacciones, nuestro cerebro identifica este tipo de actividades como ‘gratificantes’. Estos sentimientos positivos experimentados durante el uso de las redes sociales son solo temporales, es por ello que nuestro cerebro busca obtener esta recompensa ‘fácil’ de nuevo.

Por lo tanto, a medida que uses estas plataformas y experimentes dopamina durante ello, tu cerebro buscará cada vez más utilizar este tipo de gestos para obtener un placer instantáneo, lo que implicará querer volver a recurrir a este tipo de interacciones. Es de este modo como se puede llegar a desarrollar una adicción a las redes sociales.

¿Cuáles son los problemas de las redes sociales?

La adicción a las redes sociales suele tener relación con los siguientes problemas y trastornos psicológicos:

• Baja autoestima: Las personas que centran su atención al uso de las redes sociales pueden acabar distorsionando su propia auto-percepción. Esto puede suceder tanto por el efecto llamado FOMO, donde las personas creen que la vida de los demás es mejor que la suya o por las distorsiones en las imágenes de las demás personas y las comparaciones con estas irrealidades.
• Mayor aislamiento y soledad:  Los adictos a las redes sociales sienten que están constantemente conectados con los demás, lo que en realidad no es así a pesar de que interacciones a través de estas plataformas. Este tipo de conexiones ‘superficiales’ pueden acabar haciendo que una persona se aísle de los demás y experimente un sentimiento de soledad. 
• Ansiedad o depresión: Un mayor uso de las redes sociales puede aumentar la probabilidad de sufrir de trastornos como la ansiedad o la depresión.
• Trastornos del sueño: La adicción a las redes sociales también puede provocar trastornos del sueño como el insomnio debido a recurrir a estas plataformas justo antes de ir a dormir.
• Menor concentración: Estar siempre en ‘alerta’ debido a las notificaciones de las redes sociales también puede contribuir a empeorar nuestro desempeño tanto en los estudios como en el ámbito laboral.

Como vemos la adicción a las redes sociales puede acabar perjudicando muchas áreas de nuestro día a día. Por ello, es importante acudir a un psicólogo/a profesional cuando sufrimos de este tipo de adicciones.

¿Cómo saber si somos adictos a las redes sociales?

Existen algunas señales que nos pueden ayudar a identificar a una persona que sufre una adicción a las redes sociales. Entre los signos más comunes podemos destacar los siguientes:

1. Menor rendimiento: Estás percibiendo efectos negativos tanto en el trabajo como el desempeño en los estudios debido al uso de las redes sociales. Por ejemplo, las personas adictas a estas plataformas les suele ser difícil no prestar atención a las notificaciones que les llegan al móvil.
2. Uso demasiado excesivo del móvil: Los adictos a las redes sociales suelen usar el móvil y acceder en demasiadas ocasiones a estas. Tanto es así que pueden estar junto a otras personas y acceder a sus perfiles en las redes sociales constantemente.
3. Dependencia emocional: Al tener un problema emocional, las personas con una adicción a las redes sociales suelen recurrir a estas como un método para aliviar la negatividad que están experimentando.
4. Irritabilidad: Si no tienen acceso a internet o las redes sociales, las personas con esta adicción suelen sentirse muy inquietas e irritables.
5. Pensamientos obsesivos: Las personas que sufren de una adicción a las redes sociales pueden llegar a pensar en estas plataformas incluso cuando  no las están usando, de forma muy obsesiva.

Si crees que puedes estar ante un problema de adicción a las redes sociales es importante intentar actuar sobre este tipo de comportamientos. En muchas ocasiones, la ayuda de un profesional de la salud mental puede ser muy necesaria.

¿Cómo superar una adicción a las redes sociales?

Ya sea que realmente estés ante un caso de adicción a las redes sociales como simplemente quieras reducir el consumo ante estas plataformas, aquí te mostramos algunos consejos que puedes seguir para intentar disminuir su uso.

• Elimina las aplicaciones de redes sociales: Si puedes acceder a tus perfiles de redes sociales a través del ordenador, una buena iniciativa será eliminar estas aplicaciones de tu móvil.
• Apaga el teléfono durante el trabajo o el estudio: Una manera de evitar la desconcentración ante las notificaciones que nos llegan de las redes sociales es a desconectando nuestro móvil al realizar tareas que requieran de un esfuerzo mental.
• Reserva una cantidad de tiempo para las redes sociales: Para disminuir el uso de las redes sociales puedes reservar una cierta cantidad de tiempo al día para dedicarlo exclusivamente a las redes sociales y luego no volver a estas plataformas.
• Crea nuevos hábitos: Si estás usando tus perfiles en las redes sociales como un método de desconectar, quizá sea interesante tener otros hábitos más saludables que puedan ayudarte a mejorar tu ánimo. Por ejemplo, escuchar música o bailar pueden ayudarte a  aumentar la dopamina del mismo modo que lo hacen los ‘likes’ de las redes.

Las redes sociales nos han ofrecido muchas ventajas, nos permiten conectar con gente de todos los lados, crean nuevos puestos de trabajos, son una ventana a nuevos hobbies, entre otros. Pero, por otro lado, también pueden comportar muchas consecuencias para nuestra salud mental. Por ello, el equilibrio ante estas nuevas costumbres es la clave para poderlas disfrutar en todos los sentidos.

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